Descúbreme en la hoja que tiembla,
en la noche y en sus lágrimas de rocío,
en las pupilas de tu hija.
Después... cierra los ojos
y sueña.
La vida es sueño y vivimos con ensueños.
La vigilia nos regala sentires...
rostros que nos miran y otros, ausentes.
El punto exacto de la alegría
está en cada despertar, renaciendo