Ya no recuerdo cuando fue la última vez que sentí miedo y pánico por ser descubierta por mis padres cuando me veía a escondidas con él. Fue el año más significativo en mi vida a pesar de que estaba en la etapa de la adolescencia todo era nuevo para mí... Aunque no para él. Para mí; me había enamorado de la persona perfecta, era el tipo de hombre que soñé tener, no el príncipe azul que todas soñamos no me refiero a eso, él era capaz de defenderme de todos y todo, cuando me miraba sentía que yo era lo que él quería tener en ese momento que quería poseerme sin hacerme daño...

Sus besos parecían incontrolables pero se detenía cuando yo me controlaba, algo difícil en un hombre hacer, cuando éramos sólo los dos no había nadie más que lastimara lo que yo sentía, nadie fue capaz de hacerme sentir mal hablándome cosas malas de él, no sé qué tenia que no veía más allá de él y no me arrepiento de nada y sigo pensando que no hay nada malo en él y nunca lo hubo. Mis padres nunca lo aceptaron y si nuestros caminos fueran diferentes tampoco lo aceptarían para mí... Porque si yo lo amé tanto y sigo amando tanto, que ven ellos en él que yo no puedo ver... Después de ahí nos separamos decidió hacer su vida lejos del pueblo encontró una persona con la que comparte lo más hermoso de la vida... un hijo, el hijo que siempre he querido tener, por más de diez años seguía pensando en él como la primera vez hoy su hijo debe de tener casi once...

Se fue por casi diez años y no supe de él... Pero no significaba que nunca lo recordará... 
yo por mi parte estudié me gradué y también conocí a alguien muy diferente a él. Lo conocí en la universidad es una persona cariñosa, respetuosa, amable y con una enorme paciencia que jamás he visto en un hombre por mí... Llevábamos casi cinco años cuando me pidió matrimonio, la cosa era enserio para él y eso fue lo que más les agrado a mis padres... Era el hombre perfecto que mis padres podría aceptar... no puedo negar que él tiene lo suyo, me gusto desde un principio pero de ahí a casarme era diferente.

Nunca supe más de ese amor que no podía olvidar... Decidí guardarlo era una experiencia hermosa que sólo era mía... Así que decidí guardar todo lo que me recordara a él y así empezar mi propia vida, Dios sabe cuánto tiempo lo esperé, porque si soy sincera tenía la esperanza de que regresara a mi amándome como yo a él, ya no éramos unos niños ya podíamos vivir lo nuestro sin miedo a nada pero no regresó. Un nuevo giro le di a mi vida y cuando ya estaba casi lista para mi comienzo... Mi sorpresa es que regresó... Quería morirme porque ya estaba tranquila con mi vida... De verdad quería volver amar a alguien... Quería sentir la falta el aire cuando te besan...

No niego que durante el noviazgo con mi esposo porque siempre me casé; llegué a sentir cosas diferentes hacia él, de verdad lo quiero y lo amo de manera diferente pero lo quiero... Pero cuando volví a verlo se me olvido que estaba casada y muchas otras cosas más y tuve miedo de cometer locuras pero me contuve… Así pasó el primer año de casada un año de intriga y de dudas por un momento llegué a pensar que me había equivocado. Tuve la valentía de enfrentarlo después de más de diez años y hablar con él, para mi sorpresa me confesó todo... Se fue por que le parecía que yo no sería capaz de luchar por lo nuestro... Mis padres se opusieron y era cierto tenía miedo...

Entonces le parecía más fácil encontrar a alguien que arriesgara todo por él y la encontró... Pero me confesó que siempre me vio en ella y eso la hizo enloquecer... Ella me odia porque a pesar de que le dio un hijo nunca le hizo sentir lo que sentía conmigo y me refiero al amor a esa sensación en el estómago al vernos desde lejos, nuestras miradas hablaban por si solas habían personas que envidian lo que sentíamos... Pero bueno ya pasó. Hablamos y me confesó que me seguía amando y con mayor fuerza que antes y que se arrepentía de haberme dejado y que estaba dispuesto a luchar por mí, aunque estuviera casada con otro...

No podía creerlo era lo que siempre esperé, pero llegó tarde no sé si es un prueba de Dios o una mala jugada del destino no sé qué quiere Dios con todo esto... Amo a mi esposo y cuando estoy con el sólo somos él y yo él es una gran persona, es maravillosa noble y me adora así como soy qué es lo más importante, y cuando lo veo a él se me olvida que estoy casada y vuelvo a tener 15 años de nuevo esa sensación maravillosa que siento cuando lo veo es lo más hermoso y extraño que he sentido al mismo tiempo... No sé cómo terminará esto, pero lo que sí sé, es que amo a dos personas diferentes...

El hombre perfecto existiera si uno de los dos tuviera la personalidad del otro sin dejar la suya... Esto es real lo estoy viviendo ahora mismo...