SUEÑOS...
Hace apenas 36 años, en 1972, los negros que se casaban con blancas eran castigados con 3 años de prisión.
Luther King ha cambiado al mundo, gracias a que, como el mismo decía: “Tengo un sueño”; y rompió con los esquemas preestablecidos creando un nuevo paradigma:
Los negros ahora son libres y pueden compartir el asiento del autobús al lado de un blanco; un niño negro puede caminar por las calles de Alabama de la mano de una niña blanca; y todo esto, por un sueño, un sueño de libertad.
Los sueños nos enseñan que sí podemos cambiar el mundo para hacerlo un espacio extraordinario y maravilloso, en que podamos ser plenos y vivir en armonía.
Al hablar de sueños, hablamos de proyectar en pensamientos el futuro: sueños de amor proyectan un futuro lleno de plenitud y éxito; pero revivir un pasado traumático, construye un presente y un futuro lleno de resentimientos y dolor; por ésto,ten mucho cuidado con tus sueños, pues en lo que piensas hoy es en lo que te convertirás.
Soñar nos lleva a actuar, y al actuar construimos o destruimos nuestro mundo, elevando o hundiendo a la humanidad.
Gandhi, la Madre Teresa y muchos otros han elevado a la humanidad con sus sueños, demostrándonos que el amor es herramienta de trasformación.
Cuando todo indicaba que no se podía, fueron obstinados, y su inmenso amor los llevó a cambiar el entorno, construyendo un mundo mejor.
Hitler, en cambio, descendió la humanidad, pues sus sueños estaban cargados de odio y desprecio hacia el ser humano.
Esto permite asegurar que el odio conlleva la destrucción del ser humano.
El 11 de Septiembre , concretó su sueño Bin Laden al desplomar las torres gemelas, trayendo muerte y sangre a miles de inocentes, destruyendo vidas, sólo por el placer de la venganza.
Pero, ¿qué es lo que hace diferentes a quienes elevan o descienden la humanidad?
El cerebro humano, con su casi kilo y medio de peso, y sus 100,000 millones de neuronas, y un tamaño tres veces mayor que el de los primates no humanos, archiva y procesa información invisible que nos permite ser mejores y triunfar en la vida, alcanzando el éxito; o fracasar, odiar y frustrarnos.
En una ocasión, en un congreso médico, entrevistaron a un neurocirujano, y le cuestionaron sobre la importancia de los sueños, a lo que éste respondió: En más de 300 cirugías a cerebro abierto que he realizado, jamás he visto un sueño.
Los sueños son la parte intangible e invisible de los deseos más profundos del ser humano, pero son la esencia de éstos, y de aquello en lo que nos convertiremos.
Cada una de las 100,000 millones de neuronas guarda información de nuestro pasado y presente; y de alguna manera programa nuestro futuro. Por esto, puedes sanar tu pasado y construir un mejor futuro seleccionando lo que guardes ellas.
Necesitamos ser aprobados. La fórmula para hacer que nuestros hijos desarrollen sus talentos es creer en ellos; de esta manera les estaremos dando las mejores herramientas.
Para que existiera la luz eléctrica tuvo que existir quien soñara atrapar el sol para sacarlo por las noches.
A Tomás Edison lo corrieron de la escuela por idiota.
Cuando preguntó a su madre porqué ya no iría a la escuela, ella contestó “Porque eres un genio”.
Sueña, sueña, sueña…no dejes de soñar, ¡pero tampoco dejes de actuar!. Trabaja por tus sueños, por tus ideales, ¡siempre existirá una nueva meta que alcanzar!, algo que puedas mejorar, algo a inventar; ¡y tú sabes que puedes!
Los sueños construídos con amor, trascienden y elevan nuestra humanidad. Si tienes amor, no existen barreras en el mundo empresarial, familiar, ni social, que no puedan ser superadas...
...La vida es un sueño: hazlo realidad