En la vana esperanza de poder amarte Andaba caminando en las arenas del desierto que me crean mis temores a este sentir por tus labios sí, camino hoy sin rumbo y todo desolado con el llanto como canción épica y primera que escribieran los hidalgos olvidados en batalla.
La soledad nunca se llama pero siempre llega como escurridizo escarabajo que hace estragos en el averno que se va creando en el alma cansada de lamento y llanto.
Andaba inundando hermosos bosques por donde alguna vez anduve creyéndome amando aquellas pieles que alguna vez me sudaron el deseo intrusas de un futuro incierto, pues apareció tu sonrisa resplandor enamorado que a mi corazón ha amarrado.
Ya no camino más, si en tu belleza he encontrado la cárcel y condena de mis sentimientos te has vuelto un todo en la nada de no tenerte ni saberte de mi amor enterado.
Sentado se encuentra una vez más el lamento junto a mis redimidos deseos frustrados volando la imaginación que te crea desnudo y amándome en la única de mis maneras de amarte cuando cierro los ojos te siento rey de mis pasiones mas los abro y te fugas como infiel pasado.
Tengo tanto para darte en mi egoísmo de quererte todo mío aún si la razón me grita que tu identidad sexual no conjuga con la mía que incongruencia has hecho de todo mi ser ese que muere cada día en que te sueño. Si despierto y no estás a mi lado. Dedicado a ti ACR Agosto 8 de 2011 Francisco “El Jimagua”