Mi pequeño amor
La pureza sin par de tu inocencia,
Se acopla de manera magistral,
Al hermoso perfil de tu presencia,
Mi hija querida de figura angelical.
Bienvenida tú, al Edén de la ternura,
Majestuosa flor del imaginario jardín,
En tus labios esta presente la dulzura,
Y la belleza innata del fragante jazmín.
En ti se pueden inspirar fàcil los poetas,
Para escribir los versos esplendorosos,
Emprende ya, tu vuelo como las saetas,
Y jamás olvides a tus padres cariñosos.
Conquista el universo libre de temores,
Enfrenta siempre la vida con grandeza,
Procura no digerir del mal de amores,
En tu conocimiento tienes la riqueza.
Luis G Machado S.