Mi dragón
Vuelo montada sobre el poderoso dragón,
No temo al viento frio,
ni a las poderosas nubes del destino.
No giro para mirar a tras,
Nada detiene mis rutas en llamas,
ni los huecos en las manos de la negrura,
ni el canto del águila que me persigue.
Desde lo alto contemplo al siervo dócil,
respiro el aroma de los bosques,
guardando el verde prendido en mis pupilas.
Este viaje infinito es mi destino,
no se puede negar la voluntad del Universo.
Soy esclava sedienta de aventura,
Invoco a los Dioses,
Les suplico encontrar paz más allá del amor imaginado,
Más allá de la Plaza de la Revolución que me espera.
Sigo las rutas siempre montada sobre el dragón de la vida
con el fuego reflejado en la mirada.
Carmen Amaralis Vega Olivencia