ABRIL COMO TE EXTRAÑO
Fue una noche de Abril de un año cualquiera,
En donde tu amor hizo presencia en mi vida,
Forje incontables ilusiones aquella primavera,
Desde el primer beso de tu boca prohibida.
Y Abril se convirtió en el mes de mi ensueño,
Por vez primera aprecié el sentirme amado,
Eternamente feliz, de tus caricias ser el dueño,
Y tú el tesoro de mi existencia más preciado.
Cómo olvidar la serenata de esa madrugada,
En que mi voz se enternecía al pie de tu alcoba,
Y en medio de besos y lágrimas fiel enamorada,
Me prometiste que este cariño nadie me roba.
Y perturbados de aventuras nuevas en el destino,
Caminamos sonreídos por una senda misteriosa,
Un cerillo, una habitación, y un obscuro camino,
Y de pronto, yo adorándote como a una Diosa.
Incontables horas de ternura compartidas,
Cuantos sueños esperando a ser reales,
El desatino se interpuso en nuestras vidas,
Dejando solo una estela de nuestros ideales.
Nadie borrará de mi alma esos momentos,
Del Abril que me brindó tu hermosura,
Ahora que te alejas, y me dejas tormentos,
Que van acrecentando lentamente mi locura.
Quisiera que no me apartes nunca de tu vera,
Y que vuelva el caudal del río a su camino,
Entiende, es tu amistad la ardiente hoguera
Donde quiero agonizar si así es mi destino.
Sin embargo comprendo y acato tus razones,
El calor de tu alma tiene ya, otra frontera,
Es posible que en nuestros rotos corazones,
Perdure aquel Abril como eterna quimera.
Luis G Machado S.