Los resentidos sociales, son gente que ha estado contra la historia, que les gusta ir contra corriente por obstinación; algunos han fracasado, o son desertores de la educación o estudiantes profesionales que nunca “terminan”; que no quieren envejecer ni salir a trabajar, que les da envidia ver a otros intentar progresar.

Si el de día de mañana bajara un ángel del cielo inmediatamente se opondrían a su presencia y su mensaje. Para ellos no hay nada bueno. Las teorías conspirativas son su alimento emocional. La animadversión a todo lo Norteamericano es su sustento emocional; su proyecto de vida y la posición geopolítica a EEUU, y su poder en el mundo es la encarnación del demonio que los atormenta.

Algunos son excomunistas traumatizados esperando la caída del viejo orden capitalismo o esperando la resurrección del viejo comunismo. Otros definitivamente son huérfanos de viejos sueños socialistas que no volverán jamás y deambulan por las universidades con todo ese “bagaje de recuerdos y nostalgias revolucionarios”.

Si Tutamkum, El Dios mas diabólico regresar de las tinieblas y declarara la guerra a quien fuera ellos le darían su adhesión incondicional; por eso muchos aman a Osama.

Creo que todos en la vida hemos sufrido un fracaso y experimentado un éxito; Muchas veces los ideales en que creíamos no resistieron las realidades de los tiempos. Todo esto es una dialéctica de la experiencia humana, pero cuando nos inhabilitamos de reconocer esto, entonces buscamos culpables, chivos expiatorios; odiamos el progreso de otras personas; no lo aceptamos.
Entonces nos convertimos en espíritus nihilistas, y el rencor y la desilusión nos acompañan en este amargo sendero es algo terrible…