La constelación de la Cruz del Sur es la más pequeña de las 88 constelaciones de la Esfera celeste del planeta Tierra, es decir que las personas diseñadoras de los límites de las constelaciones la han delimitado a una región que es la más pequeña de todas. Se le apellida "del Sur" porque pertenece al hemisferio sur de la esfera celeste de la Tierra, no porque sólo sea visible mirando hacia el sur. Es una de las que está en plena franja de la Vía Láctea.
Aquí podemos verla en el Hemisferio sur de la Esfera celeste (imagina que estás en el centro de la esfera y que la red de coordenadas te envuelve) en relación al Polo sur celeste, el Ecuador celeste, al Sol (y la eclíptica).
Está sobre la constelación de la Mosca. Su eje horizontal hace línea con las brillantes estrellas Hadar y Alpha Centauri. El extremo sur de su eje mayor apunta hacia el punto del Polo sur de la Esfera celeste de la Tierra, de modo que es una buena guía para orientarnos desde el hemisferio sur del planeta. Aquí vemos la APARENTE rotación del Hemisferio sur de la Esfera celeste vista desde el centro del Polo sur de la Tierra. Vemos el eje mayor de la Cruz del Sur extendido hasta la cercanía del Polo sur celeste en el que realmente no hay ninguna estrella perceptible.
Antiguamente se la consideraba como parte de la constelación del Centauro aunque debido a su "agrupación" significativa fue convertida en constelación independiente. De hecho, en el mapa celeste de las fronteras de las constelaciones aparece "dentro" de la constelación del Centauro.
|
|
|
|
Es el único caso de constelación incluida dentro de otra constelación. Quizá esa decisión fuera la que hubiera llevado a que la cantidad de constelaciones de "nuestro cielo" sea un número fácil de recordar: 88, como el resultado de la suma de las letras de la palabra "COSMOS".
La mejor forma de comprender su aparente deriva debido a que estamos en una esfera (planeta) que gira es situándonos imaginariamente en el polo sur o en el ecuador del planeta. La Cruz del Sur está situada en el hemisferio sur celeste, en una región delimitada por los meridianos celestes entre los que vemos al Sol cruzar en el mediodía de los días desde el 27 de septiembre hasta el 6 de octubre. Esa situación la vemos en la imagen de la izquierda con el Sol en el punto de la eclíptica en el día 1 de octubre. Esto significa que 6 meses antes o después, a finales de marzo, podemos ver (desde el hemisferio sur de la Tierra) a la Cruz del Sur alcanzar su punto más alto de nuestro cielo en cualquier noche del año. Hace 2000 años ocurría a finales de febrero. Durante esos 9 días el Sol transita por Virgo, que está sobre la constelación del Cuervo, y ésta sobre la de la Hydra, y ésta sobre la del Centauro en cuya frontera sur está la Cruz del Sur.
Su estrella principal es llamada Acrux (la alfa de la Cruz) que forma el eje mayor con Gacrux, y este eje señala prácticamente hacia el punto del polo sur celeste. Otra estrella significativa que forma uno de los extremos del otro eje de la cruz se llama Mimosa (la estrella beta). Existe otra estrella a la que también se le ha dado el nombre de Acrux. Es Deneb y pertenece a la constelación del Cisne que también es llamada la Cruz, la del hemisferio Norte celeste.
Si habitamos en el hemisferio sur de la Tierra a 35º o más al sur del ecuador la veríamos circundar el punto del polo sur celeste (circumpolar). Hace 2000 años, durante el parto de María (nacimiento de Jesús), la Cruz del Sur era visible, por ejemplo, desde la latitud en la que está Jerusalén que está el hemisferio norte terrestre pues el movimiento de bamboleo del planeta Tierra permite que entonces se pudiera ver hacia el sur a la Cruz del Sur desde una latitud como la de Jerusalén asomando por el horizonte y.trazando un corto arco, una sección de su movimiento completo en torno al polo sur celeste que quedaba muy por debajo del horizonte. Justo 1000 años después (año 1000) se veía la Cruz ya "posada" sobre la línea del horizonte. Existe una referencia del astrólogo árabe al-Biruni del siglo 11 (año 1200) que descubrió que también desde la India (a 30º latitud norte) se podía ver, hacia el sur, una formación de estrellas conocida como Sula, traducido como “La viga de la Crucifixión”.
En el año 1000 también la Cruz del Sur estaba en el mismo meridiano celeste que el puntero de Virgo (equinoccio de septiembre). Y otros 1000 años después, actualmente, ya no se ve la Cruz del Sur desde el hemisferio norte. Digamos que ha ido hundiéndose en el horizonte.
|
Podemos considerar a la Cruz del Sur como una Firma de la primera llegada de un hombre a la Luna que ocurrió el 21 de julio de 1969, justo cuando a la Luna se le veía desde la Tierra en el mismo meridiano celeste que la Cruz del Sur, tal como la imagen anterior aunque sustituyendo al Sol por la Luna en fase de primer cuarto (el Sol estaba en Cáncer).
En el Libro de Job 9:9 se hace una posible alusión a la Cruz del Sur como "constelación del Sur" junto a otras constelaciones del firmamento que son fundamentales en el entorno espacial "más próximo" de nuestra Nave Tierra:
Él ha creado la Osa y Orión, las Pléyades y la constelación del Sur.
LA CRUZ DEL SUR: POSIBLEMENTE LA "ESTRELLA DE BELÉN".
A partir de los datos aportados por Mateo en su evangelio podemos intentar construir un modelo hipotético de lo que pudo ser la popular "Estrella de Belén". El mito de la llamada "Estrella de Belén" procede del evangelio de Mateo, capítulo 2. Mateo habla de unos magos que llegan a Jerusalén preguntando por el lugar en el que está el que ha nacido, el rey de los judíos, porque han visto "su estrella" (y porque ellos pensaban que era el rey de los judíos). Lógicamente Mateo no la menciona como "Estrella de Belén", que es un término popular y transmitido por tradición ( * ) como también "Estrella de Oriente".
* Así mismo, tampoco Mateo menciona a los magos como "reyes" ni como "tres", ni hace referencia a sus nombres ni a sus razas. Que fueran 3 personas se supone de los tres materiales de los que se componían los obsequios que ofrecieron (oro, incienso y mirra, Mateo 2:11). Mateo cuenta que María estaba en una casa con su hijo, sin mencionar a José. El evangelista Lucas no habla de los magos sino de un ángel y un ejército celestial que se aparecen a unos pastores, aunque sí menciona a José y a un niño acostado en un pesebre (Lucas 2:11 y 2:16). Ni Mateo ni Lucas mencionan algún establo ni animales, elementos que son futuros añadidos por la tradición.
El hecho de que tales personajes hubieran visto esa "estrella" y la hubieran interpretado como "estrella del Mesías" nos da para suponer que eran astrólogos o adivinos, incluso sacerdotes, pues antiguamente este oficio estaba ligado a la adivinación por observación del aparente movimiento de las estrellas. Aquella "estrella" sería la misma que luego, durante su viaje desde Jerusalén a Belén, verían delante de ellos (Mateo 2:9) al sur, pues Belén está justo al sur de Jerusalén, a 10 kms. La denominación de "estrella" no tiene por qué referirse a una estrella en el sentido literal del término sino que también puede ser interpretado como un conjunto de estrellas que formen un signo o símbolo que la tradición asociaría a Jesús (y al concepto "cristo"), como es una cruz (y también se le asoció al pez por el signo astrológico de los Peces, "Piscis", pues Jesús nació a poco de iniciarse la Era equinoccial de Piscis). Y tal cruz también es un elemento que intervino en la muerte, además de, también, de nuevo los astros como la Luna y el Sol según Lucas se refiere a que el Sol se eclipsó (Lucas 23:45).
Para intentar explicar el mítico fenómeno de la llamada "Estrella de Belén" se han propuesto teorías que lo relacionan con un cometa, con estrellas fugaces (meteoros o restos de polvo de cometa), con una supernova, con una conjunción de planetas, con ovnis o con una intervención divina (en la historia narrada por los evangelistas hay varias de ellas, especialmente "en sueños"). El cometa que después sería bautizado como "Halley" pasó unos 16 años después del nacimiento de Jesús, durante los años 9 y 10.
También podemos añadir a la lista que tal "estrella" sea una constelación o la alegoría de la forma de una constelación, y concretamente una cuyo trazado represente al símbolo o signo que luego se asociaría a Jesús, y no sólo por eso sino por su situación en el cielo en tiempos de su nacimiento. Entre las constelaciones hay una que semeja a una cruz con un eje más largo que los otros tres: la constelación de la Cruz del Sur.
¿Qué relación podría tener la constelación de la Cruz del Sur con la posibilidad de que unos personajes llamados "magos" vieran una "estrella" y la interpretaran como señal del nacimiento del que para ellos era el mesías y rey de los judíos? Hemos de conocer el firmamento y explorarlo tal como se veía desde el planeta Agua y Tierra por entonces y teniendo en cuenta que el planeta está inclinado y por eso su eje de rotación bambolea o precede (precesión). Para eso se necesita un programa de astronomía con planetario. En la página stellarium.org puedes descargarlo gratuitamente. Y hay que tener en cuenta que María diera a luz 7 años antes de lo establecido por la propia autoridad eclesiástica a través de Dionisio el Breve en el año 525 (año 533 desde el propio nacimiento de Jesús). Los mismos teólogos católicos reconocen esto, de modo que el nacimiento de Jesús se registra en el año -6 en tablas cronológicas en el apéndice de algunas ediciones de la Biblia, como en la versión de Ediciones Paulinas (aprobada por la Conferencia Episcopal Española). Por eso el año 2010 según la Iglesia es el 2017 desde el nacimiento de Jesús. El año puede ser el -7 o el -6 según se tenga en cuenta un "año 0" o un "punto 0".
Para situarnos cósmicamente, por aquellos tiempos, hacia el año 150 a.e.c, el Sol del equinoccio de primavera había penetrado ya en la región de Piscis: eran los comienzos de la "Nueva Era" zodiacal igual que a comienzos de 3er milenio de la era cristiana se habla de la "Nueva Era" (de Acuario). Hacia el año 7 a.e.c. el ecuador de la esfera celeste de la Madre Tierra cortaba por la estrella Spica de Virgo (la Espiga de la Virgen) muy cerca del Puntero de Virgo. En tal año ya había transcurrido el 7% de la teórica duración de la Era de Piscis (de 2.160 años de media en total).
Precisamente ante Piscis, a finales de febrero del año -7 (año 746 de Roma) en el cielo de este "Planetario" natural que es el planeta Tierra ocurrió una gran congregación de planetas en torno al Sol. Fue la primera gran congregación en Piscis desde que comenzara la Era (antes, en el año 66 a.e.c., se alinearon en Piscis Júpiter y Saturno con el Sol, coincidiendo con una visita del cometa Halley). En febrero del 7 a.e.c. los dos grandes planetas Júpiter y Saturno aparecían como los más próximos al Sol, flanqueándolo. También aparecían Urano (junto a Júpiter), y la Luna en fase nueva (invisible), y Venus y Mercurio cerca. Marte estaba detrás de la Tierra. Viendo desde el Sol, la Tierra y Marte estaban en Virgo y en el mismo meridiano celeste que la Cruz del Sur. Es decir que realmente en el Sistema solar hubo una cuasi-alineación Marte, Tierra, Luna, Sol, Júpiter, Saturno y Urano (si no contamos a Venus y Mercurio) entre Piscis y Virgo.
Actualmente la misma posición (o Firma en el Firmamento) del Sol en ese punto de la región de Piscis se da el 25 de marzo, justo al final del equinoccio y una semana antes de la llamada "Semana Santa" durante la que la Iglesia Católica conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesús, no el nacimiento que pudo ocurrir hace 2017 años (año -7) en ese mismo momento "firmado" por el Sol (el llamado "astro rey", el "dios solar") en ese punto de la región de Piscis. El 28 de febrero no sería la fecha de nacimiento sino una posible fecha del viaje de los magos a Belén, y posiblemente guiados por la Cruz del Sur. Evidentemente ninguna persona en la Tierra pudo ver tal congregación porque la luz del Sol vela la visión. Otra cosa es que algún astrólogo la conociera, pero en general no hubo conocimiento de ella. Pasó desapercibida. Ahora sí podemos comprobarlo con un ordenador y con un programa de astronomía, y sin duda que es un acontecimiento llamativo de modo que podríamos fijar nuestra atención en él y perdernos el resto.
Pero lo más interesante ocurría durante las noches de este periodo del año, hacia finales de febrero y comienzos de marzo, pues durante aquellas órbitas de la Tierra, desde la latitud de Jerusalén podía verse la constelación de la Cruz del Sur, y concretamente ese día del 28 de febrero del año -7 se veía en posición erguida sobre el horizonte hacia las 11 de la noche, y justo y precisamente mirando hacia el Sur, dirección hacia la que está Belén respecto a Jerusalén. Entre ambas localidades hay una distancia de 10 kilómetros.
La siguiente escena completa a las anteriores desde otro punto de vista, ya en la propia superficie del planeta desde Jerusalén, y recrea el aspecto del Firmamento en la noche del 28 de febrero del año -7 a las 11 de la noche y mirando justo hacia el Sur. La Cruz (del Sur) aparece frente a nosotros, en su punto más alto en esa noche respecto al horizonte.
|
Mateo narra que "la estrella del mesías" (posiblemente "el signo (la cruz) de Jesucristo") iba delante de los magos hasta que fue a posarse sobre el lugar en el que estaba el niño (en la localidad de Belén). Una viajera o un viajero que se dirigiera desde Jerusalén hacia el sur (hacia Belén) durante aquellas noches hacia las 23 horas, veía delante suyo a la constelación de la Cruz del Sur, y a la izquierda a la estrella Alpha Centauri, la más cercana al Sol, prácticamente en la línea del horizonte. Incluso Alpha Centauri como "una estrella" en el sentido literal de la expresión podría ser la "estrella de Belén". Es la vecina más cercana al Sol y es la segunda más brillante del hemisferio sur celeste de la Tierra (después de Sirio). Que la Cruz del Sur "se pose" puede interpretarse como que quedara "erguida" por encima del horizonte (como en la imagen anterior). Sólo 1000 años después, debido al movimiento de bamboleo (precesión) del planeta, se vería ya literalmente pegada a la línea del horizonte.
Un viaje de 10 kilómetros en camello puede durar 1 hora, quizá menos. Durante 1 hora la Tierra gira 15 grados hacia el oriente, lo cual percibimos desde tierra como 15 grados de deriva aparente de las estrellas hacia occidente, aunque no es una diferencia muy significativa. Por esto quizá los viajeros (los magos/astrólogos/adivinos/sacerdotes) no habrían apreciado que la Cruz del Sur derivara significativamente hacia occidente (hacia la derecha de ellos) y por eso la tuvieran "delante" durante todo el tiempo de su viaje. Y no hacia el oriente (su izquieda) pues iban hacia el sur.
Esto sólo es una reconstrucción de una posibilidad deducida a partir de los escasos datos del evangelio de Mateo.
A partir de ese momento, a escala horaria (o de giro del planeta), la Cruz del Sur iría declinando cada hora 15 grados hacia occidente hasta desaparecer tras y bajo el horizonte (realmente nosotros perdemos línea de visión de las estrellas debido al giro del planeta hacia oriente). Y a escala diaria, a medida que transcurriesen los días/noches (y la traslación del planeta), a la misma hora (las 11 de la noche) ocurriría lo mismo pero a esa escala mayor, más lenta. En términos cronológicos esto quiere decir que veríamos a la Cruz del Sur erguida un poco más temprano cada noche hasta que hacia el 20 de junio (solsticio) ya no se percibiera debido a la luz del Sol. Y a mayor escala aún, la correspondiente al lento movimiento de bamboleo (escala centenaria, de siglos), a la misma hora en la misma fecha/día, latitud y lugar, la constelación iría descendiendo en vertical hacia la línea del horizonte. De hecho, hacia el año 1000, aparecería "posada" sobre la línea del horizonte sur de Jerusalén. En el siglo 11 (año 1200) de la era cristiana., el astrólogo árabe al-Biruni descubrió que desde 30º latitud norte (desde la India) se podía ver, hacia el sur, una formación de estrellas conocida como Sula, traducido como “La viga de la Crucifixión” (Jerusalén está a casi 32º norte). Si realmente esto es cierto, se le podría haber llamado así como recordatorio de ser la constelación que habría servido de relación entre el nacimiento (por ser interpretada como "guía" por los magos) y la crucifixión/muerte de Jesús (por la forma de la cruz).
Y otros 1000 años más tarde, actualmente, ya no se ve desde esa latitud del hemisferio norte. Digamos que con el paso de los siglos (de 100 en 100 órbitas del planeta Tierra al Sol) y la precesión del planeta (1 grado cada 71 órbitas), la Cruz del Sur (vista desde latitud 30-32 grados norte) ha ido hundiéndose en el horizonte. Quizá algo como esto expresara Dante Alighieri (que conocía los efectos de la precesión de la Tierra) al referirse en su Divina Comedia a una era sin Dios tras la muerte de Cristo. Dante murió en 1321 cuando la Cruz (la constelación) empezaba a dejar de verse desde el hemisferio norte del planeta Tierra por efecto del bamboleo y de la precesión. De hecho, actualmente ya no podemos ver la Cruz del Sur desde el hemisferio norte, ni por ello desde Jerusalén.
También el investigador Richard Hinckley Allen apunta en su obra Los nombres de las estrellas que el dato sobre la Sula o “La viga de la Crucifixión”.que el astrólogo árabe al-Biruni decía que se observaba desde latitud 30º norte (en la India) en el siglo 11, podría ser una clave para interpretar una referencia contenida en la Divina Comedia de Dante (principios del siglo 14), cuando Dante entra en el Purgatorio por la entrada que se abre al hemisferio sur de la Tierra (pensaban que el hemisferio sur estaba sumergido por las aguas) y declara lo siguiente en el Canto 1:22-4 de Purgatorio:
"dispuesto a espiar este extraño polo
|
recuerdo cuatro estrellas
|
las mismas que vieron los primeros hombres,
|
y que desde entonces ningún vivo ha vuelto a ver."
|
Cuatro estrellas son las que forman la Cruz del Sur en el hemisferio sur del cielo de la Tierra. La expresión "los primeros hombres" puede referirse a las generaciones humanas de hasta 4000 años a.e.c. cuando desde latitudes medias del hemisferio norte del planeta sí había línea de visión de la constelación de la Cruz gracias al ángulo que entonces tenía la inclinación del eje del planeta respecto a las constelaciones. De hecho incluso se vería el polo sur celeste en el horizonte y a la constelación de la Cruz muy alta en el cielo. Al año 746 de Roma (7 antes de la era cristiana) el planeta ya había bamboleado y cambiado la dirección de su inclinación y por eso desde el hemisferio norte la Cruz ya se veía un poco más cerca del horizonte (y así la habrían visto los magos), y tras el 1er milenio de la era cristiana ya se veía a la Cruz justo sobre la línea del horizonte. Desde finales del 2º milenio cristiano no se ha vuelto a ver desde el hemisferio norte de la Tierra.
Para hacernos una idea del transcurso del tiempo precesional zodiacal, desde el año 150 a.e.c. hasta 2010 d.e.c. (año en que se creó esta página) el Sol del equinoccio de marzo ha transitado (precedido) por Piscis. Son justo 2160 años, cantidad establecida por El Astrólogo como la media de cada Era zodiacal de la Precesión por el zodiaco de 12. En el sistema astrológico el signo de Piscis dura 29 días (del 20 de febrero al 21 de marzo) lo cual se traduce a escala de Era zodiacal como 2.058 años, si bien la anchura establecida por fronteras para la constelación de Piscis es de 38 días, lo cual se traduce a escala de Era zodiacal como 2.700 años.
Así, según la Astrología quedarían 100 años (literalmente) para el fin de la Era de Piscis y el inicio de la Era de Acuario, y según la anchura de la región de Piscis quedarían unos 700 años. La siguiente Era en la deriva del Sol precesional/equinoccial es Acuario cuyo símbolo es mencionado en Lucas 22:10 cuando Jesús les dice a sus discípulos donde hacer los preparativos de la cena de pascua, la celebración por la libertad del pueblo de Dios tras su cautiverio en Egipto durante 430 años (también 430 años es el tiempo entre el inicio del lineal calendario gregoriano y el final/reinicio del Gran Ciclo maya, y 430 años son 700 años venusianos). Jesús les indica como señal a un hombre que les saldrá al encuentro llevando un cántaro de agua ("fulano" en otras versiones), descripción semejante a un "aguador" como logo identificativo del signo de Acuario.
Con todo, el 28 de febrero del año -7 ocurrió esa congregación planetaria ante la constelación de Piscis (la era zodiacal recién estrenada entonces) y hacia la medianoche de aquella fecha, mirando desde Jerusalén en dirección sur hacia Belén, la constelación de la Cruz estaba erguida sobre el horizonte mientras el Ecuador celeste (proyección del de la Madre Tierra) cortaba por la estrella Spica, de Virgo. Otro fenómeno significativo de ese año -7 fue un eclipse de Sol el 29 de abril a las 19:00 cuando la Cruz del Sur estaba prácticamente erguida hacia el sur. Y fue junto a las Pléyades, igual al que ocurrirá el 20 de mayo del 2012.
El 28 de febrero no sería la fecha de nacimiento de Jesús sino una posible fecha del viaje de los magos a Belén que interpretaran la forma de la constelación de la Cruz del Sur como símbolo de ese concepto ("cristo") que usamos como denominación de una supuesta "realidad espiritual" sobre la que nuestra propia ignorancia e interés ha creado el suficiente miedo, conflicto y dolor como para pasar a ejercer el impagable privilegio de la reflexión en íntimo diálogo con la razón y el corazón.
Ver también Eclipse en Jerusalén.
Algunos datos concretos de este artículo han sido tomados de estas referencias:
http://www.escepticospr.com/Archivos/belen.htm
http://www.astroyciencia.com/2007/03/26/historia-de-la-constelacion-de-la-cruz-del-sur/
|