crisis de Enojos y arrebatos?
¿Quién no se enojó nunca alguna vez?
Hasta Jesús se enojó feo cuando vió a los vendedores en el templo y los agarró a latigazos!
Por mi parte, tuve que aprender a dominar mis enojos, pues éstos me cegaban, no medía lo que decía ni lo que hacía.Realmente quería cambiar, pues el daño que hace uno con las palabras puede ser irreparable, y en casa el que sufrió fue mi esposo.
Mi templanza se esfumaba de repente si algo me molestaba.
El enojo prende fuego en el hogar y las malas contestaciones hacen subir el furor! Por eso es que hay hogares en los que constantemente
“arde Troya”…! Uno se enoja y otro contesta mal… y es el cuento de nunca acabar.
Así es como nacen los rencores, los resentimientos y la desconfianza.
¿
Cómo reaccionar cuando algo me enoja fácilmente?
- Empezar por callar… el silencio aquieta el espíritu y los pensamientos se organizan en forma sabia.
Esclesiastes 7:9 “No te apresures en tu espíritu a enojarte; porque el enojo reposa en el seno de los necios”
Dios tiene razones justas para enojarse (con los malos, con los desobedientes, pecadores…) pero él no despierta todo su enojo, eso quiere decir que el enojo es controlable y ud. Y yo podemos tomar riendas de todo asunto sin desatar la ira.
Salmo 78:38 “Pero él, misericordioso, perdonaba la maldad, y no los destruía; Y apartó muchas veces su ira, Y no despertó todo su enojo”
- Escuchar más y responder tarde… hace que quizás puedas frenar el enojo que estés equivocadamente acumulando, sólo por oir una parte de la historia. Tu esposo/a puede tener dificultad para explicar las cosas, tengamos paciencia!
Hebreos 5:11 “Acerca de esto tenemos mucho que decir, y difícil de explicar, por cuanto os habéis hecho
TARDOS para oír”
Dios bendiga nuestros dos oídos y dé sabiduría a nuestra única boca!