Hola mis amados:
No hay nada mejor que la comunicación, el Señor desde el Edén con Adán y Eva lo hizo, ellos tenían una comunión maravillosa la cual perdieron cuando pecaron, pero eso no quiere decir que entre nosotros no se haga y cuanto más con El que desea que le busquemos cada mañana en oración, le contemos lo que nos sucede y Él nos responde con amor y ternura, para El somos especiales y es la razón por la cual nuestra vida valdrá la pena.
COMUNICACIÓN DIARIA
La sala de fiestas estaba alegremente adornada con preciosas flores y cintas. A lo ancho del frente del salón se encontraba un estandarte en el que podía leerse: "Muchas felicitaciones para una pareja radiante". Celebraban su cincuenta aniversario de bodas. Familiares y amistades, ya sean que vinieran cerca o lejos, se habían congregado para rendirles homenaje. Los cuatro hijos se turnaron para expresar sus más tiernos recuerdos y las grandes lecciones aprendidas de sus padres. Luego, partieron el pastel, tomaron fotos y todos disfrutaron por estar juntos.
Con gran rapidez, la tarde llegó a su final. Los amigos se despidieron; los miembros de la familia llevaron consigo recuerdos y se retiraron. Ya en la noche, uno de los nietos preguntó: "Abuelita, ¿cuál es el secreto para estar felizmente casados por cincuenta años?" Sin vacilar, su abuela respondió: "Siempre estamos dispuestos a conversar de cualquier asunto".
Investigaciones recientes apoyan esa conclusión. Un estudio realizado, entre parejas con más de veinte años de matrimonio, reveló que lo único que tenían en común era que charlaban a diario. Quizás desde que descubrieron cómo comunicarse se dispusieron a hablar de sus diferencias a la llegada de períodos difíciles. Lo mismo se aplica a nuestra relación con Dios. Si con regularidad nos comunicamos con Él, nos volveremos hacia Él automática e inmediatamente cuando llegue la crisis.
Tomado del libro: Amanecer con Dios
Colosenses 4:6 Que vuestra conversación sea siempre con gracia.
SOLO EN JESUS
Yo era una persona muy independiente, y Dios comenzó a darme Juan 15:5 en los comienzos de mi andar con El. Una de las leyes espirituales para recibir poder espiritual de Dios es depender enteramente de Él. Sin fe, no podemos agradar a Dios.
La fe implica apoyar toda nuestra personalidad humana, en total confianza, en el poder, la sabiduría y la bondad de Dios. Debemos apoyarnos en El, confiar solo en El y depender enteramente de Él, quitarnos todo el peso de encima de nuestros hombros y ponerlo en los suyos. Sin la ayuda de Dios no podemos cambiar nada en nuestra vida. No podemos cambiarnos a nosotros mismos, ni a nuestro cónyuge, ni a nuestra familia, ni a nuestros amigos ni nuestras circunstancias.
Realmente, separados de El no podemos hacer nada! Cuando no permitimos que Dios sea Dios, podemos decir adiós a la paz y al gozo. Tratamos de descubrir cómo funcionan las cosas, cuando no tenemos siquiera que tocarlas con el pensamiento.
Nada es demasiado difícil ni demasiado extraordinario para Dios, pero muchas cosas son demasiado difíciles o demasiado extraordinarias para nosotros. Debemos crecer hasta llegar a descansar en el hecho de que conocemos al que sabe... y estamos libres para confiar en Él.
Es tan liberador decir: “Señor, no sé qué hacer, y aunque lo supiera, no podría hacerlo. Pero mis ojos están en ti. Voy a esperar y observar cómo Tú haces todo”.
Palabra de Dios para ti:
Y todo Judá estaba en pie delante del Señor, con sus niños y sus mujeres y sus hijos. Y estaba allí Jahaziel hijo de Zacarías, hijo de Benaia, hijo de Jeiel, hijo de Matanias, levita de los hijos de Asaf, sobre el cual vino el Espíritu del Señor en medio de la reunión; y dijo: Oíd, Judá todo, y vosotros moradores de Jerusalén, y tú, rey Josafat. El Señor os dice así: No temáis ni os amedrentéis delante de esta multitud tan grande, porque no es vuestra la guerra, sino de Dios. 2 Crónicas 20:13-15
La dependencia nuestra del Señor es fundamental en la vida, como nos equivocamos cuando hacemos lo que nos parece mejor, cuando nos apoyamos en nuestras fuerzas, al ver el resultado de esto es que le buscamos, para no cometer el mismo error, siempre vayamos a Su presencia y pidámosle que haga Su perfecta voluntad en nosotros y cumpla Su propósito en nuestras vidas, siempre Su guianza nos llevara a lo mejor.
Los amo y bendigo en Jesucristo.
MAGNOLIA
MÉTELA EN TU CORAZÓN
Según un predicador escocés, guardar la palabra en el corazón es meter una cosa buena en un buen lugar para un buen fin. Muchos tienen la Biblia en la cabeza, o en el bolsillo. Lo que necesitan es tenerla en el corazón. -D.L. Moody-
"En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti"
Salmo 119:11
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