Hola mis amados:
En la vida nos encontraremos con personas que no nos toleran, no aceptan lo que decimos o somos, nos reciben con lo que menos esperamos, pero que ellos se lleven de nosotros la mejor impresión, la del amor, tolerancia, perdón y respeto, esto hace más en ellos que responderles de la misma forma, porque como dice la Palabra del Señor, venceremos el mal con el bien, siempre prevalece el bien sobre el mal, así que somos embajadores para que muchos sean tocados y puedan cambiar sus actitudes, de nosotros depende.
CUANDO ALGUIEN
Cuando alguien te de una rama con espinas, en vez de tomarla con indignación y correr el riesgo de pincharte las manos, recíbela con serenidad y plántala en el jardín de tu vida. Mas cuando recojas las rosas, no te olvides de mandar por lo menos una para ese alguien. Al fin de cuentas, fue ese alguien quien te dio la rama.
Cuando alguien te dé un puntapié, en vez de devolvérselo, recuerda que diste un paso al frente, en tanto que él quedó un paso atrás.
Cuando alguien te grite, no respondas con otro grito, para no correr el riesgo de quedarte también ronco.
Cuando alguien te escupa, recuerda que un poco de agua y saliva harán que quedes aún más limpio que antes, mientras que el escupidor perdió un poco de saliva que actuaría benéficamente en su digestión.
Cuando alguien se ría de ti, sonríe a ese alguien. Al final, él precisa mucho una sonrisa.
Luis Homero
ORACIÓN
Señor y Padre nuestro, te alabo, te bendigo, te exalto, te doy gracias por Tu maravillosa Palabra. Tu Palabra es Verdad y estoy ante ti hoy para adorarte en espíritu y en verdad. Gracias porque has cambiado mi corazón de piedra por un corazón de carne que siente las necesidades, las angustias y el sufrimiento de los demás. Gracias porque me ayudas cada día más a ver a los otros como Cristo mismo me vio. Te ruego, Padre, que perdones mis faltas contra Ti. Me arrepiento de todo corazón de todos mis pecados y mi transgresión. Te doy gracias porque eres un Dios perdonador que me ama eternamente y que me limpias de todo pecado.
Gracias porque me ayudas a entender cuan inmenso valor tiene para mi vida el perdón. Gracias por poner en mí un corazón perdonador. En el nombre de Jesús, Amén
LA IRA.
Es fácil definir: el ruido del alma.
Ira. El irritante invisible del corazón.
Ira. El despiadado invasor del silencio.
Cuanto más fuerte se hace, más nos desesperamos.
Algunos estarán pensando: No tienes idea de lo difícil que ha sido mi vida. Y tienes razón, no la tengo.
Pero si tengo una idea muy clara de lo desdichado que será tu futuro a menos que logres dominar tu ira.
Toma una radiografía del mundo del vengativo y contemplaras un tumor de amargura: negro, amenazante, maligno. Carcinoma del espíritu.
Sus fibras fatales trepan alrededor del corazón y lo destruyen.
El ayer no lo puedes alterar, pero tu reacción ante el ayer sí.
El pasado no lo puedes cambiar, pero tu reacción a tu pasado sí.
Nunca dejes que el ruido del alma te impida disfrutar del silencio del espíritu. Es en el silencio de la quietud espiritual cuando podemos escuchar la susurrante voz del Maestro. Solo se escucha cuando ya hemos desterrado el ruido del alma…La Ira.
Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, ni deis lugar al diablo. Efesios 4.26–27
Mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse; porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios. Santiago 1:19–20.
La ira hace que reaccionemos de formas diversas, por lo general malas y que hacen que la situación empeore en vez de mejorar, por tanto si tenemos una comunión con el Señor podemos estar tranquilos, en paz, soportando y obrando en la forma que al Señor le agrada, porque lo que se diga o se haga con ira no lo olvidaran, pero si la respuesta es sabia, los hechos dignos de recordar, entonces habremos hecho una obra maravillosa en la persona que nos ve u oye, aprendamos de Jesús que es manso y humilde de corazón.
Los amo y bendigo en Jesucristo.
MAGNOLIA
MÉTELA EN TU CORAZÓN
Según un predicador escocés, guardar la palabra en el corazón es meter una cosa buena en un buen lugar para un buen fin. Muchos tienen la Biblia en la cabeza, o en el bolsillo. Lo que necesitan es tenerla en el corazón. -D.L. Moody-
"En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti"
Salmo 119:11
By Andrea
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