"DraCaroline ayúdeme por favor mi madre me está volviendo loca, no puedo hacer algo porque piensa que me va a pasar algo. Para todo me dice "cuidado" "cuídate" todo conlleva un riesgo. Lo ha hecho por años y ahora que tengo 21 años no se como desenvolverme. No puedo ni subirme a un bus pensando que se puede estrellar, que si alguien me puede asaltar. No disfruto al salir de mi casa. por favor ayúdeme. Siempre ando como si algo me fuera a pasar. Le agradezco lo que hace por nosotros desde Bolivia muchos abrazos.



Trabajé con una mujer que creció con una madre muy sobreprotectora. Ella recuerda que su madre nunca la dejaba subir en la bicicleta sin supervisión, aún después de haber aprendido hábitos de seguridad muy buenos, y aún cuando era la norma de salir en bici a esa edad en el vecindario sin supervisión. (Solo para ponerlo en contexto, esta mujer creció en los 1940s y 1950s cuando esta era la regla general).

Su madre desarrolló esta solución. Ella mantenía un anillo del talco o polvo alrededor de la bicicleta en el sótano, de tal manera que la hija no podía mover la bicicleta sin dejar una huella en el polvo. Ella recibía entonces un castigo si movía la bicicleta, y de esta manera su mamá trataba de protegerla de un posible accidente en la calle.

Mi paciente era una persona muy determinada, aún siendo una jovencita, y no se daría por derrotada. Se convirtió lo suficientemente fuerte que hasta podría levantar la bicicleta derechito en el aire y cargarla sin siquiera rociar el polvo. Su madre nunca descubrió su secreto y así pudo darse sus vueltecitas en la calle con el corazón super contento.

Pero aún cuando su cuerpo se desarrollo de tal manera que podía alzar la bicicleta solita, y manejarla por horas, su mente no se desarrolló al punto en la que verdaderamente se sentía bien en lo que estaba haciendo (¿pueden ver el resultado de ser tan sobreprotectoras mamacitas queridas?)

Ya que fue puesta en una posición en la que tuvo que romper las reglas para gozar de lo que tanto quería como los otros niños, desarrolló un extraordinario sentimiento de culpa (ah madre mìa me sobreprotegiste demasiado), y una sensación de lo que estaba haciendo era malo, y que eventualmente sería castigada. Cuando alcanzó el final de la adolescencia, empezó a tener ataques de pánico en cualquier parte que estuviera "lejos de casa" (ah madre mía porque me sobreprotegiste)

Mi paciente creía que esta era "la raíz de la causa" de sus males, y estuve bastante acuerdo con ella. Probablemente heredó la predisposición genética de preocuparse y tener cuidado por el lado de la familia de su madre, y su experiencia con la bicicleta parecía ser el centro de la activación a la predisposición. Pienso que este es un claro ejemplo de descubrir "pista" como la causa de lo que podemos generalmente esperar.

Pero el hecho de saberlo no detuvo los ataques de pánico. Ella sabía porque tuvo el primero, pero eso no detuvo los siguientes ataques de pánico. Ella no tenía esos ataques recurrentes por sus antecedentes y la experiencia de la bicicleta. Ella tenía esos ataques recurrentes porque se mantuvo engañada al tratar de protegerse de ellos. Cuando ella pudo entenderlo y digerirlo para ponerlo en práctica, empezó a recuperarse.

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Dios Padre, Jesús, María y José nos bendigan a todos, Padre Pío le amo mucho gracias por todas sus intercesiones

Su amiga del alma