Hola mis amados:
Solemos dar regalos en navidad, cuando alguien cumple años, si alguien se casa o gradúa y así en muchas ocasiones, pero todos ellos nos cuestan dinero, acá hay una lista de ocho que no tienen ningún valor monetario, pero si un valor interior de mucho peso, si frecuentamos en darlos haremos felices a quienes los reciben, si sembramos esto pues nuestra cosecha será aun mejor, por esa razón no dejemos de obsequiarlos con mucho amor y sabiendo que es un servicio a nuestro prójimo.
REGALOS QUE NO CUESTAN.
OCHO REGALOS QUE NO CUESTAN NADA…
1.- El regalo de Escuchar: Pero realmente escuchar, sin interrumpir, bostezar, o criticar. Solo escuchar.
2.- El regalo del Cariño Ser generoso con besos, abrazos, palmadas en la espalda y apretones de manos, estas pequeñas acciones demuestran el cariño por tu familia y amigos.
3.- El regalo de la sonrisa Llena tu vida de imágenes con sonrisas, dibujos y caricaturas, y tu regalo dirá "me gusta reír contigo"
4.- El regalo de una nota escrita Esto puede ser un simple "gracias por ayudarme", un detalle como estos puede ser recordado de por vida, Y CAMBIARLA AUN TAL VEZ.
5.- El regalo del reconocimiento Un simple pero sincero "te ves genial de rojo", "has hecho un gran trabajo" o "fue una estupenda comida" puede hacer especial un día.
6.- El regalo del favor Todo los días procura hacer un favor.
7.- El regalo de la soledad Hay días que no hay nada mejor que estar solo. Se sensible a aquellos días y da este regalo a ti mismo o pídelo a los demás.
8.- El regalo de la disposición a la gratitud La forma mas fácil de hacer sentir bien a la gente es decirle cosas que no son difíciles de decir como: !!"Hola"!! y !!"Muchas Gracias"!!
El justo hace ventaja á su prójimo: Mas el camino de los impíos les hace errar. Lucas 10:27 DAR GRACIAS
Una madre solía orar en las noches con una hija pequeña, de unos seis años, al acostarla.
Una noche la madre le dijo: - Hoy vamos a pedir a Dios un poco más para que sane a la tía Marta.
Oraron por la tía Marta, cada noche, durante un par de semanas. Después, la madre no dijo nada y dejaron de pedir. A la tercera o cuarta noche sin hacerlo, la niña preguntó:
- Mamá, ¿por qué no oramos por la tía Marta?. - Es que Diosito ya la puso buena – respondió la madre.
- Y si la puso buena – replicó la niña- ¿no deberíamos orar para darle las gracias?.
Somos más dados a pedir que a agradecer. Lo de aquellos diez leprosos curados y de los que solo uno vuelve a dar las gracias a Jesús, se repite en nuestra vida a diario.
De cada diez veces que pedimos, quizás, no damos gracias ni una. La gratitud del que pide abre la mano del que da: el agradecimiento facilita la generosidad. ¡Y tenemos tanto que agradecer a Dios!. Agustín Filgueiras
Dad gracias al SEÑOR, invocad su nombre, dad a conocer sus obras entre los pueblos. 1 Crónicas 16:8
Y han de estar presentes cada mañana para dar gracias y para alabar al SEÑOR, y asimismo por la noche. 1 Crónicas 23:30
Ser agradecidos es algo que espera nuestro Dios de nosotros, por eso dejo el ejemplo de los 10 leprosos y solo dos se devolvieron a dar gracias, recordemos cuantos favores hemos recibido de El, el aire que respiramos por ejemplo y no pagamos, esta ahí para que lo inhalemos, la vida que hay en cada uno de nosotros, nuestro corazón late, la sangre circula y nos podemos mover, son dadivas maravillosas que provienen solo quien nos da lo mejor, asi que agradezcamole cada dia.
Los amo y bendigo en Jesucristo.
MAGNOLIA.
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