Hola mis amados:

Hemos pensado en alguna ocasión cuantos momentos hay en un día de nuestra vida?, verdad que nadie se detiene a pensar esto?, pues déjame decirte que en cada uno de ellos esta ahí el Señor Jesús para ayudarnos, darnos aliento, amor, paz, seguridad y todo lo que requiramos, porque no todos son buenos, hay algunos que no son tan agradables, y ahí es donde debemos tener fe de que no estamos solos.
 
EN TODO MOMENTO.
 
En los momentos sombríos, Yo seré tu luz.
En los momentos de tristeza, seré tu alegría.
En los momentos de lucha, seré tu liberación.
En los momentos de debilidad, te infundiré fuerzas.
En los momentos de incertidumbre, Yo seré tu explicación.
En momentos de duda, seré fe para ti.
Y algo más importante todavía: Soy amor para ti.
Te amo y te perdono.

No te desanimes, pues; no te descorazones.
No mires atrás.
No sientas remordimiento por errores o pecados cometidos.
Lo pasado ya pasó.
He cubierto esos errores y pecados.
Lo que era como la grana será emblanquecido como la nieve.
Como está lejos el oriente del occidente hice alejar de ti tus pecados.
Desde el primer momento en que imploras Mi perdón, desde el preciso instante en que clamas a Mí, te concedo Mi perdón.
Por tanto, no hay ya motivo para que sigas preocupándote, temiendo y llevando la carga tú mismo.
DIOS
 
EL DIOS EGO

“El amor es la respuesta y tú lo sabes muy bien. El amor es una flor, tienes que dejarlo crecer”. (John Lennon)*
¿Cómo hago para resumir en unos breves párrafos lo que deseo comunicar? Comencemos por este pensamiento: vivimos bajo el imperio del EGOÍSMO y lo único que puede salvarnos es una REVOLUCIÓN DE AMOR.
Que nadie nos distraiga ni intente confundirnos.
El odio no es la antítesis del amor. Es una reacción, una consecuencia cuya causa es el egoísmo.
Las guerras no son la contraposición del amor. Siempre tienen su origen en actitudes e intereses egoístas.
No es la falta de alimentos lo que lleva a la muerte por inanición a decenas de miles de personas cada año. Es el egoísmo.
Las discusiones y pleitos diarios en el seno familiar, en apariencia “insignificantes” pero que con el correr del tiempo se pueden transformar en parricidio, matricidio, conyugicidio y fratricidio: egoísmo.
En el Nuevo Testamento leemos: “¿Saben por qué hay guerras y pleitos entre ustedes? ¡Pues porque no saben dominar su egoísmo y su maldad!”. Santiago 4.1 (TLA).
Me falta espacio para enumerar palabras como divorcio, suicidio, discriminación racial, aborto, eutanasia, delincuencia, guerras “religiosas”, adicciones de todo tipo, y un largo “etcétera”. Dejemos de buscar “chivos expiatorios”. Cesemos nuestra búsqueda de paliativos. La raíz de la miseria humana se halla en el exacerbado culto al “yo”. Es ahí en donde debemos comenzar.
¡Pero el amor es el antídoto! ¡El amor es la solución!
Por eso, mediante este humilde espacio hago un llamado a la audiencia internacional que recibe y lee estas reflexiones a ser parte activa de una REVOLUCIÓN DE AMOR.
REVOLUCIÓN, esa acción deliberada, enérgica y que produce cambios duraderos.
AMOR, ése que está magníficamente expresado en el Manifiesto Revolucionario de Primera Corintios 13.**
Mi intención es incomodar. Despertar. Inspirar. No somos extraterrestres. Somos parte. ¿Qué haremos? Piénselo durante este fin de semana. Primero el problema: el dios Ego. Segundo, en siete días, el antídoto: el amor. Luego, en catorce días, veremos la manera: la revolución.
CRISTIAN FRANCO

Por tanto de nosotros depende derrotar el dios ego de esta tierra, empecemos por nosotros mismos, si nuestro deseo es servir pues pensaremos en los demás antes que en nosotros mismos, esto hará que muchos deseen imitarnos y así poco a poco derrotaremos esto que acarrea tantos males al mundo de hoy y de siempre, porque el hombre ha hecho que se infle y el ego y caiga el servicio y el pensar en los demás, que seamos ejemplo en todo momento.

Los amo y bendigo en Jesucristo.

MAGNOLIA.