Hola mis amados:

En la vida muchas veces sentimos el rechazo, el desprecio y somos como pelotas que vamos rebotando por la vida sin que a nadie le importe, pero Jesús si esta pendiente de cada ser humano y le ama como es, por eso al venir a El y ser restaurado por Su Bálsamo de amor es lo mas especial que podemos experimentar, si te encuentras en situación parecida, lee y veras que lindo es nuestro Salvador.

DOBLETE

"¡Bendito sea Dios, que no rechazó mi plegaria ni me negó su amor!" Salmo 66:20
En la historia del tenis de Argentina hubo una mujer que escribió su nombre entre las mejores del mundo. Gabriela Sabatini es en Argentina el símbolo femenino del tenis. Marcó un antes y un después. Y lo que los especialistas siempre ponderaron de su juego fue su magnífico revés. Ella misma cuenta, que cuando comenzó a jugar era muy mala y tenía un revés horrible. Así que siendo muy niña. Pasó horas jugando al frontón y pegándole siempre a la pelota de revés.
Tanto practicó, que finalmente, perfeccionó su juego y llegó a ser una de las mejores jugadoras de tenis del mundo. El frontón tiene esa virtud. Rechaza todo lo que le tiran. Jamás se queda con nada, devuelve todo. Vivimos en tiempos de rechazos. Donde somos dejados de lado casi sin excusas ni justificaciones. Y a nadie le importa.
Somos como la pelotita de tenis, viajando sin sentido por la vida, siendo golpeados y rechazados sin tener descanso.
David conocía la sensación. Estaba acostumbrado a que la vida le devuelva todo lo que pedía o necesitaba. Tal vez hoy estás como David, cansado de correr tras la pelotita, sin respuestas. Sintiendo que todo lo que pides es rechazado por una pared de silencio y desprecio.
Pero David sabía algo que lo consolaba. Él sabía que Dios no lo rechazaba. Dios no es un frontón, que devuelve con dureza todo lo que le pedimos. Dios siempre acepta lo que le tiramos. Y además, nos hace el doblete. No solo no nos rechaza, sino que además, jamás nos niega Su amor. No importa cual sea el reclamo, Dios siempre escucha, y Su amor nunca cesa.
Eso no implica que nos vaya a dar todo lo que pidamos, puede hacerlo como puede no hacerlo. Pero frente a los silencios o las negativas de Dios siempre es muy saludable recordar esta gran verdad que David hoy nos deja. Dios jamás rechaza nuestra oración, jamás está demasiado ocupado para no atendernos. Dios siempre escucha con atención lo que pedimos. Y aunque no le guste el pedido, nos sigue amando con su amor entrañable.
En el frontón celestial, Dios recibe todo lo que le pedimos y nos devuelve siempre Su amor. ¡Qué glorioso doblete que Dios hace con nosotros cada día! Disfruta de la devolución divina, siempre es para tu bien.
REFLEXIÓN - ¡Un doble que vale triple!

¿LO HACEMOS LOS DOS?

Dime a menudo que me amas, a través de tu charla, tus acciones y tus gestos.
No supongas que yo lo sé.
Quizá muestre signos de turbación e incluso niegue que lo necesite, pero no lo creas, hazlo de cualquier manera.
Felicítame a menudo por los trabajos bien desempeñados,
y cuando falle, no me desacredites, en vez de ello dame seguridad.
No tomes muchas de las cosas que hago por ti, como algo que se da por sentado.
El refuerzo positivo y el agradecimiento darán como resultado, la seguridad de que yo las repita.
Hazme saber cuando te sientas deprimido, solo o incomprendido.
Seré más fuerte al saber que tengo el poder de consolarte.
Los sentimientos si no se verbalizan, pueden ser destructivos.
Recuerda, aun cuando te amo, no siempre puedo leer tu mente.
Expresa sentimientos y pensamientos jubilosos.
Le darán vitalidad a nuestra relación.
Es maravilloso festejar los no cumpleaños, los días de San Valentín personales.
Dar regalos de amor sin razón alguna y escucharte cuando expresas con palabras tu felicidad.
Cuando me respondes ...me siento tan especial!!!, que eso compensa a todos aquellos que, durante el día, pasaron a mi lado sin verme.
No invalides mi ser diciéndome que lo que veo o lo que siento es insignificante o no es real.
Si lo veo y lo siento...para mí...se trata de mi experiencia y por lo tanto es importante y real.
Escúchame sin juzgarme o sin ideas preconcebidas.
Ser escuchado, lo mismo que ser visto, es algo vital.
Si en verdad me ves y me escuchas tal y como soy en el momento, eso será una constante afirmación de mí ser, a medida que mutuamente nos ayudamos a cambiar.
Tócame. Sostenme en tus brazos.
Acaríciame y  abrázame.
Eso me revitaliza.
Respeta mis silencios.
Casi siempre descubro las alternativas para mis problemas, mi creatividad y mis necesidades espirituales en los momentos de quietud.
Hazle saber a los demás, que me valoras.
La afirmación pública de nuestro amor, me hace sentir especial y llena de orgullo.
Es bueno compartir con los demás la alegría de nuestra relación.
¿Lo haces tú?¿Lo hago yo?
Leo Buscaglia

Precioso mensaje que si lo aplicamos a nuestra vida hara mucho bien tanto a nuestra pareja como hijos, amigos, familiares y todo contacto personal que tengamos, porque debe importarnos los sentimientos y carácter de cada persona, por eso respetamos su comportamiento y le animamos a que sigamos unidos aceptándole sin condición y manifestando nuestro amor hacia ellos.

Los amo y bendigo en Jesucristo.

MAGNOLIA

MÉTELA EN TU CORAZÓN

Según un predicador escocés, guardar la palabra en el corazón es meter una cosa buena en un buen lugar para un buen fin. Muchos tienen la Biblia en la cabeza, o en el bolsillo.  Lo que necesitan es tenerla en el corazón. -D.L. Moody-

"En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti"

Salmo 119: