-«Jefe», le dijo,
-«creo que tiene que venir a la sala de máquinas.
No puedo hacer que los motores anden»
-«Por supuesto que no puede», le dijo el jefe de ingenieros. «Acabo de encallar el barco».
Que tontería en la vida, es cuando comenzamos a creer que somos los únicos y que el mundo depende solo de nosotros. En la vida estamos rodeados de personas y cada uno tiene un papel vital que desarrollar.
Necesitamos aprender a considerar al otro y saber que cada uno es experto en algo y cuando nos unimos el barco de la vida puede marchar.
Dios nos ha dado dones y capacidades a cada uno, pero siempre dejemos que Él sea el capitan del barco.
Triste es cuando otros te fallan.
Cuando esa gente en quien confiaste y creíste, (tus amigos) te desilucionan, e incluso habla mal de tí.
Desearias poner en evidencia su error. Sientes odio, tristeza, dolor y desilución al mismo tiempo.
Y al final no sabes qué sentir.
Aunque esto te pase, sigue creyendo en la amistad sincera. Sigue dando lo mejor de tí a las personas y nunca pagues con la misma moneda.
Si te han fallado, haz lo posible para no fallar.
Si te han desilucionado, sé siempre recto para no cometer el mismo error. Si te han calumniado, ofrece a Dios esa situación que sea El quien juzgue, pero no envenenes tu corazón con el deseo de hacer tu justicia.
No importa el error que otros hayan cometido, no te hagas insensible y frío ante las personas quienes te necesiten.
Sigue haciendo el bien, sigue creyendo, sigue ofreciendo lo mejor que tengas y ante todo, deja el juicio en las manos de Dios.
La vida es hermosa y tienes la oportunidad de seguir viviendo. Sigue adelante tu camino sin ver los tropiezos tuyos y menos los de los demás como obstáculos. Y no cometas los mismos errores que otros hayan cometido contigo.
Desconozco el autor.