Esta misma mañana, mi amiga Esther:
- A que hora te vas a Barcelona Mery?
- Pués no sé , porque dependo del chofer. Igual en el transcurso de la mañana, que igual después de comer, que igual mañana por la mañana .
- ¿ ó igual el chofer decide no ir y no vais , no?, replicó Esther.
Me quedé un instante en silencio y respondí :
- Pués no es eso. Verás .....Si no voy a Barcelona, será porque yo no quiero. Será porque habré elegido yo no ir, ya que para ir a Barcelona tengo más alternativas que las que me proporciona ese chófer.
....muchas veces echamos la culpa a los demás de nuestras desdichas, cuando en definitiva la mayoria de veces es nuestra cobardia la que nos las produce.