Cada día descubro que aquello que llamamos crecimiento del ser humano, es simplemente una frase alegre para continuar viviendo en el engaño perpétuo hacia uno mismo...  Este escrito fue ofrecido en la Comunidad hace más de 7 años, toda una octava ha acontecido, y sigue y seguirá tan vigente como hace más de 20 años atrás cuando lo escribí y publiqué por vez primera...  Descubrir "El terror de nuestra propia situación" requiere ayuda especializada, que es difícil de encontrar actuálmente, al igual que lo fue en el pasado...  ¿Qué existe en nuestra psíque que no nos permite vernos tal y como somos actualmente?   NUESTRAS QUERIDÍSIMAS NOCIONES!!!  (Mar 7, '04)

Quizá en la siguiente historia queden plasmados, tanto en lo aportado por Mireya como en lo aportado por Oscar, los impedimentos para alcanzar la etapa correcta para que el aprendizaje pueda aparecer en la relación del Guía con el Discípulo real.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Un Día le peguntaron a un nuevo Guía del Trabajo:

"¿Cómo llegaste a alcanzar este grado en el Trabajo, por tus propios deseos, cuando veíamos que sólo eras un sirviente, algo menos que un discí­pulo del Maestro?"

Él respondió: "Él me enseñó lo que él quería enseñarme a mí, y yo lo aprendí".

El Maestro me dijo un día: "Yo no puedo enseñar a los otros, a los discípulos, hasta el mismo grado que a ti, porque ellos siempre quieren plantear las preguntas, ellos demandan las reuniones, ellos tratan de imponer la estructura de la enseñanza, y ellos, por lo tanto, sólo se están enseñando a ellos mismos lo que actualmente ya saben".

Yo le dije: "Enséñame a mí lo que tú puedas, y dime cómo aprender".

Y así llegué a ser su sucesor.

Las personas tienen queridísimas nociones acerca de cómo la enseñanza y el aprendizaje deberían de tomar lugar. Ellas no pueden tener las nociones y a su vez alcanzar el aprendizaje.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

¿Acaso mis deseos de aprender no son auténticos? ¿Acaso esos deseos míos que siento que nacen en las profundidades de mi ser no pertenecen a mi esencia? Y si no lucho por volver reales mis deseos, ¿es preferible permanecer pasivo?

¡Espera!, impaciente buscador. ¿Acaso no has oído que tu esencia sufrió un cataclismo no de acuerdo con las leyes cuando aún eras un niño sin formación propia alguna? ¿Acaso nadie te ha informado que ese cataclismo provocó que te protegieras con un amortiguador o mecanismo de defensa para no volver a sufrir otra vez tal tipo de acontecimiento? ¿Acaso todavía no has observado cómo te defiendes ante cada suceso o persona que no coincide con tus propias creencias? ¿Piensas que estás libre para desear algo no egoísta a partir de ti?

Recuerda…, discípulo que confías en ti mismo, la esencia es un niño y no un adulto con personalidad, y los deseos de un niño no son tan truculentos, simplemente él está ahí para aprender todo lo que le salga al paso, y confía en que sus padres sabrán enseñarle cómo aprender lo que él requiere aprender para volverlo un joven responsable, tanto hacia sí mismo como hacia todo lo que lo rodea. Y si en tus años formatorios, a ti discípulo lleno de querencias y opiniones, no te enseñaron a aprender de esa manera, todos tus deseos están actualmente contaminados; ¿pero quién soy yo para advertírtelo?, así que te sugiero que comiences a observarte para poderlo constatar, confía en lo que encuentres por ti mismo acerca de tu situación actual. Y si logras descubrir esos queridísimos deseos que nacen por tu egoísmo, lucha para tratar de controlarlos, y si fracasas en esa lucha contra ti mismo, te sugiero que busques ayuda para hacerlo productivo, busca alguien que pueda enseñarte a aprender cómo aprender. Y no olvides que el aprendizaje nada tiene que ver con los logros ni con las expectativas, sino con el aprender por el aprendizaje mismo, con el desaprendizaje mismo.

Bueno, lo aportado por Mireya y Oscar, me condujo a la ponderación. Y más, cuando ayer se reunió conmigo uno de mis Guías que viene a impartir un Seminario a mi ciudad, y donde comentamos acerca de ese rasgo principal tan difícil de descubrir en nuestro ser. . .

Carlos de la Garza P.