Estimado Oscar:
Es imposible para el hombre ordinario entender, y mucho menos llegar a
comprender, las experiencias directamente vivenciadas por la persona que está
trabajando sobre sí mismo; y aun comprenderlas para aquel mismo que las está
experimentando debido a la rapidez y sutilidad con que se presentan. Pero ese
es el verdadero alimento de impresiones de que nos habla la enseñanza, alimento
que puede nutrir las partes superiores de nuestro ser; no lo podemos obtener
tal y como se obtienen las impresiones mundanas, exigen esfuerzos y sacrificios
muy intensos basados en una comprensión plena...
Intentaré presentarte de otra manera todo lo que está involucrado en los
ejercicios internos con que trabajamos los que pertenecemos a los grupos de
trabajo auténticos; porque es el medio para alcanzar esas impresiones del mundo
real...
Sólo me referiré a dos de los medios principales en que se apoyan la mayoría de
los ejercicios. El primero es la concentración intencional de nuestra atención.
Para los que están principiando, usamos la concentración sobre un objeto
externo o una imagen externa o interna, o sobre la repetición de palabras o
mantrams...
La meta de la concentración es acallar los pensamientos y emociones mentales,
incluyendo la relajación corporal; sólo es una preparación necesaria para
entrar a los ejercicios más demandantes. El ejercicio de concentración más
redituable y que sólo se le indica a los miembros que ya han pasado por el
trabajo previo, es concentrar su atención en la entrada y salida del aíre
durante la respiración, sobre todo en una área pequeña, las fosas nasales en la
punta de la nariz...
Aquel que alcance el grado de concentración necesario sobre la entrada y salida
del aíre, encontrará que al final se detendrán las emociones y los
pensamientos, logrando un estado de silencio y tranquilidad. Pero todo ese
trabajo tan demandante, no nos ayuda a comprender las cosas o a nosotros tal y
como somos; sólo ayudan a detener las reacciones emocionales, no a
clarificarlas ni a limpiarlas, sólo a suspender su manifestación reaccional,
pero es algo estrictamente necesario. Casi todas las enseñanzas que proliferan
por todos lados, incluyendo hasta el cuarto camino no-auténtico, intentan
llegar a eso: "Detener los pensamientos", como ellos dicen; pero no
saben qué es lo que sigue después de eso...
El segundo método, que sólo se transmite a aquellos que han logrado lo
anterior, es ir directamente a la raíz o causa de todas nuestras reacciones
emocionales y sufrimientos ordinarios. Este método se basa en lo siguiente:
Cualquier impresión, externa o interna es recibida por los cinco sentidos y la
mente. A partir de la sensación de dichas impresiones se despierta una emoción,
que tarde o temprano se convierten en nuestras reacciones características. Si
logramos captar las diversas sensaciones que aparecen en nuestro cuerpo,
entonces esa consciencia nos posibilita llegar al fondo de la cosas, a la raíz
de nuestros problemas. Me concentro sistemáticamente en cada parte de mi
cuerpo, después de haber logrado lo anterior con la ayuda de la respiración,
debo intentar dirigir mi atención de manera ordenada a través de cada parte del
cuerpo para descubrir la sensación que está presente ahí, y no dejarnos dirigir
por las sensaciones que aparecen. Si encontramos una determinada sensación en
cierta parte corporal, o descubrimos la carencia de sensación en ciertas partes
del cuerpo, mantenemos nuestra atención sobre eso, eso es todo. Después de mucho
trabajo sobre este método, existe la posibilidad de comprender cómo son las
cosas en la realidad.
No puedo agregar nada más, porque se puede prestar a malentendidos por aquellos
miembros de la comunidad que jamás han trabajado sobre sí mismos, y hasta se
creerían aptos para enseñar a otros...
Pero para ti, Oscar, creo que lo anterior te ayudará a ver otro lado del asunto
de los ejercicios internos. Sólo agregaré una cosa para ti: el mundo real está
formado de vibraciones; eso te ayudará a salir de la ignorancia si lograr
comprenderlo de manera práctica y directa.
Todo eso de los diversos "yoes", de los "buenos" y
"malos" que mencionaste, sólo sirve para ahondar nuestra confusión, y
lo que el trabajo real pregona es alcanzar la comprensión de todas las cosas,
sobre todo de nosotros mismos.
Ya vez la contestación que te dieron a lo que expusiste: te arrojaron una
cantidad de palabrerías para ocultar su ignorancia.
Pero para ti es diferente, se requiere que ahondes cada vez más dentro de la
comprensión de ti mismo, para los que no están en un trabajo directo sobre
ellos mismos, toda nuestra compasión...
Carlos de la Garza P.
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