Sr, Gurdjieff. Extracto de "Fragmentos de una enseñanza desconocida" de P. Ouspensky.
"¿Cómo despertar? ¿Cómo escapar de este sueño? Estas preguntas son las
más importantes, las más vitales que un hombre tiene que hacerse. Pero
antes de hacérselas deberá convencerse del hecho mismo de su sueño. Mas
sólo es posible convencerse de esto tratando de despertar.
Cuando un hombre haya comprendido que no se recuerda a sí mismo y que el recuerdo de sí significa un despertar hasta cierto
punto, y cuando haya visto por experiencia lo difícil que es recordarse
a sí mismo, entonces comprenderá que para despertar no basta desearlo.
Diremos, aún con más precisión, que un hombre no puede despertarse por
sí mismo. Pero si veinte hombres convienen en que el primero que se
despierte despertará a los demás, ya tienen alguna posibilidad. Aun
esto, sin embargo, es insuficiente, porque los veinte hombres pueden
dormirse al mismo tiempo y soñar que se están despertando. Por
consiguiente esto no basta; hace falta más. Estos veinte hombres deben
ser vigilados por un hombre que no está dormido o que no se duerme tan
fácilmente como ellos, o que se duerme conscientemente cuando es
posible, cuando de ello no resulte daño alguno ni para él ni para los
demás. Deben encontrar a un hombre de este género y contratarlo para que
los despierte y no les permita volverse a dormir. Sin esto es imposible
despertar. Esto es lo que hay que comprender.
"Es posible pensar
durante mil años; es posible escribir bibliotecas enteras, inventar
millones de teorías y todo esto en sueño, sin ninguna posibilidad de
despertar. Por el contrario, estas teorías y estos libros escritos o
inventados por dormidos simplemente tendrán como efecto arrastrar a
otros hombres al sueño.”