El Tiempo Vivo y la Integración de la Vida-M.Nicoll
EL EÓN
El
autor Hermético que nos aconseja la práctica de pensar que vivimos en
todos los puntos del tiempo, indica que de este modo comienza el hombre
a ser transformado en 'substancia eterna'. ¿Qué hay tras esta
afirmación? ¿Por qué se conecta la noción de 'eternidad' —sea cual fuere
su significado— con el pensar acerca de este todo de la vida?
Es menester librarse de algunos significados falsos que damos a las palabras eterno y eternidad.
La idea psicológica conectada a la vida eterna no
puede limitarse a la opinión de que el hombre cambia de estado con la
muerte por el mero hecho de morir. Seria más apropiado decir que se
refiere, ante todo, a algún cambio que el hombre puede obtener ahora, en
esta vida, un cambio conectado con el logro de la unidad.
El término moderno 'psicología' significa literalmente la ciencia del alma. Pero
en los tiempos antiguos existía verdaderamente una ciencia del alma,
cimentada en la idea de que el hombre se halla en un estado imperfecto,
aun cuando sea capaz de alcanzar un estado o condición superior. El
hombre puede 'perfeccionarse', según la terminología del Nuevo
Testamento. Puede alcanzar otro estado de sí, no mediante la educación
corriente, por muy buena que sea, sino por una clase de educación que
la vida no la proporciona y que no puede hallarse en los caminos
ordinarios. Esta segunda educación fue la tarea original de la filosofía
en su más antiguo y práctico sentido. Se refería al estado no acabado o
incompleto de cada ser en la vida, al estado en que nos hallamos
nosotros, y que es un estado
de desarmonía, unilateral, lleno de contradicciones, '....el hombre ya
no es una unidad; la unidad interior, o la armonía de su existencia, se
desintegra en una diversidad de funciones autónomas. Ningún acto total
es posible; la voluntad está separada del conocimiento, el sentimiento
del intelecto.... La psicología empírica puede tratar acerca del hombre desintegrado, nunca acerca del hombre integrado'. Emil Brunner, El Mundo y el Mundo, 1931)
(Este moderno autor observa que la reintegración del hombre a una
unidad requiere ideas y esfuerzos que yacen fuera del campo con que
trata la psicología moderna. Yo lo expresaría diciendo que la unidad del
hombre es un imposible en el nivel de conciencia que utiliza).