Mi querida Valeria, ya ves, cómo se presentan de manera disque inesperada los impactos de Trabajo en nuestras vidas... Y muchas veces, tal y como ahora a ti te tocó sentirlo, cuando a uno se le reconoce una cierta capacidad más allá de lo habitual, de inmediato este inmesirecordioso Trabajo, similar a Heropas, pone más carga sobre tus ya muy cargadas espaldas...
Hace poco, estando disque de turista por un pueblo muy lindo de Cuenca, España, llamado: Salinas del Manzano, en el que mi cuerpo ya cansado pensaba recuperse un poco de tanto ajetreo por lo del Seminario en Valencia, después de haber vivido un primer día colmado de actividades muy demandante desde las primeras horas de la madrugada, y ya siendo cercana la medianoche, una mujer valenciana, que yo pensaba que había comprendido y practicado lo que es la real consideración externa, con sus brazos en jarras, se levanta de pronto y me grita con ese acento valenciano tan majo: "SENOR CARLOS..., USTED NO TIENE DERECHO A CANSARSE...; A NOSOTROS SI NOS ES PERMITIDA ESA DEBILIDAD..., PERO NO A USTED...!!!!"
Y en mi interior de inmediato afloró un cuestinamiento tan profundo como incidioso, que me repetía: "En qué trampa vine a caer,,,!!! Pues te diré aquí en secreto mi querida Valeria, a partir de ese instante no me quedó otra más que "HACERME PENDEJO", es decir, comportarme en apriencia como si estuviera lleno de energía y muy alerta como activo, aunque por dentro estaba roncando muy cómodamente...
Pues ahora comenzaras a comprender en tu propio ser, mi querida Valeria, el significado exacto: "DE ESTAR AL SERVICIO DE LOS DEMÁS".
Se cumple esa Ley bíblica, una de las 28, tan mal entendida que dice: "Al que tiene... más y más se le pedirá...; y al que no tiene... hasta su boleto de entrada se le devolverá"
Asi que podrías haber reflexionado con mucho ahinco antes de agradecerle a alguien por esa disque "distinción", porque es lo más parecido a esas maldiciones gitanas...
Pero de un condenado como lo soy yo, sólo puedo abrir mis brazos y abrazarte con ellos para hacerte sentir lo que en mi alma se siente, y decirte, como ya una vez lo mencionó uno de los padres de la patria, diciendo: "YO SÓLO SOY EL SIERVO DE LA NACIÓN..."
Y vaya coincidencia contigo de ese procer mi queridísima Valeria, tambien era oriundo de tu tierra: MORELIA, MICHOACÁN... Tú todavia no de la nacion, sino de más allá, es decir, estar a cargo de una Carabela que zarpa en busca de lo ignotos y enbravecidos Mares Mundiales...
Carlos de la Garza...
p.d.- y como te lo advertí, mejor no le agradezcas nada a esa tal mujer valenciana, ya vez cómo me trató a mí, al que según ama y respeta....; es una méndiga zorra de cola muy pero muy larga...que siempre se sle con la suya!!!