MAÑANA SERÁ OTRO DIA.
Cuántas veces nuestro panorama
se viste triste y desalentador y,
súbitamente algo pasa
y encontramos solución a nuestro problema
y algo que parecía no tener solución,
se resuelve fácilmente.
El tiempo cierra heridas
y suaviza resentimientos
Cuando nos sintamos agobiados por los problemas,
el cansancio o el dolor, digamos con firmeza:
¡¡MAÑANA SERÁ OTRO DIA!!
D/A