Si pudiera ser abanico,
pediría tus plumas prestadas,
pondría brisa en el cielo,
alegría en tu mirada,
una sonrisa en tu boca,
alegría en tus pensamientos,
borraría esa tristeza
que parece acompañarte dentro, muy dentro,
haría de la brisa una tormenta,
que el alba rompa tranquila, en silencio
y la rabia que a veces te acompaña,
pudiera llevarla el viento,
Haría un huracán con esas plumas,
aunque sea por espacios amor, segundos, momento borrando pasados, dejando presentes... no esperes futuros... nunca es poco y demasiado tiempo es siempre...