Hace poco me dijeron que me había tocado bailar con cosas feas,
y pensé que era una muy dulce manera de decirlo, con mucho cariño.
Yo tengo una visión algo más dura, creo que como todo aquel que ha bailado,
baila o bailará con cosas feas. Yo lo veo como una batalla, una guerra.
He librado batallas duras, otras más fáciles de vencer. He luchado contra
la TÍMIDEZ, contra la BURLA, contra la ENVIDI...A, la HIPOCRESÍA,
RELACIONES DIFÍCILES Y COMPLICADAS, situaciones en las que
nadie quiere encontrarse. Me he encontado entre dos mares, nadando a contracorriente,
sin saber hacia que mar dirigirme. Con tener que escoger entre un bando o otro
sin saber ni querer renunciar a alguno de los dos, aunque en otro tiempo no hubiera dudado.
He luchado contra mi pesimismo, mi baja autoestima, mi infravaloración.
Estas últimas son batallas con las que a veces me reencuentro por esas situaciones difíciles,
esos bailes feos. Hay veces en que me he encontrado con amigos que me han
ayudado a vencer ( esos son los verdaderos ) y otros que me han hecho casi perder la batalla.
Mis enemigos son el MIEDO. Miedo al fracaso, a no conseguir salir adelante,
a dejar escapar oportunidades, a perder lo que tengo o he conseguido.
A veces por mi manera de actuar, otras por lo difícil que te lo pone la vida.
Piensas y crees que estas haciendo todo lo posible pero ella se empeña en poner trabas,
en distanciar las cosas. Y sientes impotencia.
IMPOTENCIA, otro enemigo que se ceba en darte por vencido.
Esa impotencia que sientes cuando no puedes cambiar las cosas, cuando no te comprenden,
cuando intentas que los otros vean lo que tu ves y ellos se empeñan en cerrar
los ojos y sientes que se te escapan irremediablemente. Y no es culpa del otro,
sino de la situación que vives. Sientes que ni todo el amor que existe parece
poder vencer y sientes que se distancia y que no sabes que hacer para impedirlo.
Sientes que si no cambian las cosas lo vas a perder y luchas, y luchas, y estas a punto de rendirte.
La ANGUSTIA, el DOLOR,la ANSIEDAD,
son otros enemigos que te llegan a hacer tocar fondo.
Pero tengo una ALIADA, una GRAN ALIADA. MI PEQUEÑA GUERRERA.
De ella he aprendido y sigo aprendiendo a luchar, a presentar batalla, a no dejarme vencer.
Ella es mi fuerza, la que me hace sentir esperanza, por la que sueño,
por la que lucho, por la que intentaré conseguir todas mis metas.
He podido y podré llegar a tocar fondo. Momentos en los que te cansas de bailar,
en los que estas a punto de rendirte, en los que las fuerzas flaquean.
Suele pasar cuando estas en batalla continuamente, llega un punto donde necesitas
descansar, un pequeño respiro, para llorar, para permitir que alguien cuide de
ti por una vez, para sacar toda la rabia, la angustia, el dolor.
De otra manera no podrias seguir presentando batalla.
Pero me vuelvo a levantar. Vuelvo a coger mi escudo y mi espada y vuelvo
a presentar batalla. Hasta el final, hasta el último aliento.
PORQUE SOMOS GUERRERAS, SOLDADOS. Y PRESENTAREMOS
BATALLA HASTA EL FINAL. SOMOS ESPARTANAS Y VENCEREMOS.
SI HEMOS DE PERDER SERÁ LUCHANDO
Y. Ruiz