Disfruta de las ocurrencias e imaginacion que tiene
los niños ante ciertas situaciones del diario vivir.



Mi hija de cinco años, y yo, estabamos viendo television cuando
depronto pasaradon un comercial de una famosa crema antiarrugas,
anunciada por una modelo muy bonita.
-Mira, mama, es la crema que te pones tu!
-Exclamo la niña.
-Si- Respondi sonriendo-, es la misma.
Entonces, tras observar alternadamente a la modelo y ami señalo:
-Pero a ti no te ha dado resultado verdad?



Mientras viajabamos por carretera una tarde lluviosa, nuestra camioneta empezo a fallar.
Sin detenernos para revisar, mi esposo y yo hicimos conjeturas sobre cualpodria ser la causa.
-Quizas sea el filtro de la gasoliza -dijo el.
-Si- convine-, o el filtro de aire.
Entonces nuestro hijo de 3 años , sugirio:
-O el filtro del cafe.



En cierta ocasion mi familia y yo estabaos comiendo son unos amigos en un
restaurante cuando derepente mi hija, entonces de 6 años, se volvio hacia mi
para decirme algo al oido. Al ver esto mi esposo la reconvino:
-Hija, recuerda que secretos en reunion es mala educacion.
Sin titubiar la niña replico:
-Secretos en la infancia no tienen importancia.
Sorprendido por la respuesta que nunca habiamos oido, mi marido le
pregunto:
-Donde aprendistes eso?
-En ninguna parte. Solo es defensa personal.



Mi hijo es tan parlachin en la escuela, que su maestra constantemente
tiene que separlos de los otros niños para que no lo distraiga.
Cierto dia, muy molesta con las frecuentes quejas, lo reprendi:
-Por que todo el tiempo te metes en problemas por hablar
tanto en clases?
-No es culpa mia mama -intento defenderse-.
La maestra siempre se pone hablar cuando yo ya estoy conversando.



Cuando mis dos hijas eran pequeñas, aveces me hacian preguntas
sobre la muerte, y yo trataba de responder lo mejor que podia.
Un dia les dije que si llegara a morirme ya no podria estan
con ellas, pero que desde el cielo las cuidaria aunque
no puedan verme. Al escuchar esto la mayor me abrazo
y con tristeza dijo que no queria que me muriera nunca, porque
si eso pasaba nunca mas podria cuidarlas, llevarlas a la
escuela, darles de comer , ni contarles cuentos antes de dormir.
-Verdad, hermanita?
-le pregunto la menor en busca de apoyo.
Pero esta despues de pensarlo por unos instantes respondio:
-Si pero tampoco nos podria castigar!.



En una ocasion fuimos a pasear a un pueblo cercano con mis dos hijos,
de 10 y 8 años, quienes ivan en el asiento trasero del auto.
Al pasar frente a una iglesia, el pequeño la señalo y dijo:
-Miren eso! Donde nosotros vivimos tambien hay una iglesia de
San Jacobo!
-Es cierto respondio su hermano- Debe ser una cadena.



No hace mucho tiempo lei en un periodico que cuando el Che Guevara
visito la ciudadde Guatemala se hospedo en el mismo hotel
en el que mi madre acostumbraba alojarse en ese tiempo
cuando viajaba a la capital. Reunidos en familia, comentamos
un poco divertidos que quizas mama y el Comandante alguna vez
durmieron bajo el mismo techo.
En la tarde de ese dia recibi visita de una amiga .
Mientras conversaba con ella, mi hija entonces de 8 años se
acerco a nosotras y muy orgullosa dijo:
-Ya le contastes que mi abuela durmio una vez
con el Che Guevara?.



Durante unas vacaciones de ciudad de Mexico visitamos el zoologico
de Chapultepec. A mitad del recorriedo llegamos a una jaula
ocupada por un magnifico ejemplar de lobo y nos quedamos
admirandolo, al igual que otras personas.
En eso se acerco una pareja acompañada por su
pequeña hija, a la cual le dieron:
-Mira un lobo!
La niña se acerco corriendo a la jaula, pero luego de mirar al animal
por unos instantes, en tono de desilusion pregunto:
-Y caperucita?.



En una ocasion mi nuera le estaba explicando a Eric, mi nieto de
ocho años, que me habian practicado una cirugia de emergencia y que
pasaria algun tiempo antes de recuperarme por completo .
-Ay, no! -exclamo el niño-
Crees que mi abuelo sepa hacer galletas?



Cierta vez, Jed mi sobrino de cinco años, tenia programada una visita a su padre
que vivia en otra ciudad. Mi hermana le pregunto si creia poder
volar solo en el avion. Tras pensar unos minutos en la
pregunta, el niño finalmente respondio:
-Yo creo que si, pero alguien tiene que mostrarme como echarlo a andar.
