INTUICIÓN, LA GRAN AMIGA
La famosa frase "intuición femenina" no es un tópico y tiene su origen en la herencia genética. La intuición puede ejercitarse y, cuanto más se practica, más se desarrolla.
Buscando una definición Desde todos los campos teóricos (psicología, pedagogía, filosofía, metafísica e, incluso, desde la religión) se ha intentado encontrar una respuesta a la pregunta: ¿qué es la intuición?
Varias teorías han buscado la preciada respuesta, pero todavía, hoy en día, es imposible dar una contestación definitiva y certera. Por ello, repasaremos las diferentes definiciones y explicaciones que más se han aproximado a su definición.
Línea directa con el cosmos Los psicólogos traspersonales consideran que la intuición es la identificación con la energía creativa del cosmos. Stanislav Grof lo define así: "cuando nos identificamos con la conciencia cósmica, sentimos que somos capaces de albergar en nuestro interior la totalidad de la existencia y comprender la realidad que subyace a todas las realidades particulares.
En esta experiencia tenemos la sensación profunda de estar en contacto con el principio supremo y último de todo lo existente". Sería como si entráramos en contacto con "la base de datos" del universo y ella nos proporcionara una información que como individuos no poseemos, pero como parte del cosmos sí.
En fin, la falta de práctica nos ha hecho perder algunos de los sentidos que nos permitían conocer otras realidades. Así es que no desarrollamos correctamente el sentido de la intuición.
Escuchando los sentidos Otras corrientes, en cambio, apuntan que la intuición es la interpretación que nuestro cerebro da a las señales recibidas por sentidos en los que normalmente no reparamos. Por ejemplo, un hombre entra en una cueva y tiene la intuición de que no es un buen lugar para quedarse. Podría ser que su olfato le hubiera trasmitido al cerebro la señal de que había un oso. El hombre no está acostumbrado a detectar el olor del oso, pero su cerebro le lanza un aviso.
Normalmente, estamos acostumbrados a fiarnos de la lógica, del razonamiento y no escuchamos al resto de los sentidos. Pero éstos continúan funcionando y emitiendo señales que, al no ser racionalizadas, tan sólo pueden manifestarse en forma de intuición.
Preguntándole a la intuición Laura Day es una psicóloga estadounidense que ha dedicado su vida al estudio de la intuición. Ha impartido varios cursos sobre intuición práctica por todo el mundo, tiene consulta en Nueva York y es la autora del libro "La Intuición Eficaz". Según sus investigaciones, la intuición es un proceso no lineal y no empírico a través del cual interpretamos información sobre preguntas que previamente nos planteamos.
Day asegura que este proceso no depende de los sentidos ni de la memoria ni de las experiencias. La intuición utiliza un lenguaje diferente que debemos interpretar con unos códigos que no son los que habitualmente usamos.
El método que propone la psicóloga norteamericana para desarrollar la intuición es activar con una pregunta que debe ser clara y precisa para evitar las respuestas ambiguas.
Sueños, la puerta abierta El estudio de los sueños también ha hecho referencia a la intuición. En el estado onírico, según algunos estudiosos, es más fácil que la intuición se manifieste sin trabas ni ataduras. Se trataría de los famosos sueños premonitorios en los que las barreras del tiempo desaparecen, por lo que podemos acceder a información del futuro.
También pueden utilizar un lenguaje diferente, enviarnos señales premonitorias que requieren una interpretación. En cualquiera de los casos, lo importante es que en el espacio onírico es mucho más fácil que la intuición fluya, sin someterla al filtro del razonamiento.
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