Descubrí que no existe un mejor día que el hoy, que se nos presenta la oportunidad de disfrutar, de sentir, de respirar, de ver el sol, de expresar, decir lo que sientes, de sentir abrazos, etc. Y que cada día puede ser ese hoy, donde sientes que va a ser el mejor día de tu vida, y lo disfrutas como tal con la expectación de lo que viene y con la fe de que va a ser maravilloso, con sus cosas buenas y las que a veces no entendemos en el momento, depende de nosotros permitirnos creer, con energías renovadas y la frente en alto