Él parecía un caballero, si era todo un señor, cuando ella lo conocio. De pronto se trasformo.
Nunca hubiera imaginado, que con la misma mano, que le brindaba caricias, él la hubiera lastimado.
Ella que tanto lo amaba, se alejo de sus amigas, ahora la traicionaba, golpeaba y maltrataba.
Espera que se arrepienta, es sensible, apasionado… No pierdas tiempo amiga no creas, no ha cambiado.
Por eso sigue adelante, con fuerza, no te detengas, ¡Olvida a ese maldito! Pues él no vale la pena.
Hombre que levanta la mano merece estar en la cárcel, pues no es un ser humano quien aplica el maltrato.
By Arjona Delia
Todos los derechos reservados. Copyright ©o5/04/2010
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