Campanadas a muertos
I
Campanadas a muertos / hacen un grito a la guerra / de los tres hijos que han perdido / las tres campanas negras.
Y el pueblo se refugia / cuando se acerca el lamento, / ya son tres penas más / que tenemos que guardar en la memoria…
Campanadas a muertos / por las tres bocas cerradas, / ay de aquel trovador / que olvide las tres notas!
Quién ha cortado el aliento / de estos cuerpos tan jóvenes, / que no tienen más tesoro / que la razón de los que lloran.
Asesinos de razones, de vidas, / que no podáis descansar en ninguno de vuestros días / y que nuestras memorias os persigan hasta la muerte.
Campanadas a muertos / hacen un grito a la guerra / de los tres hijos que han perdido / las tres campanas negras.
Yo pronuncio tu nombre,
en esta noche oscura,
y tu nombre me suena
más lejano que nunca.
Más lejano que todas las estrellas
y más doliente que la mansa lluvia.
(Federico. De SI MIS MANOS PUDIERAN DESHOJAR)