Ingredientes (4 personas)
- 1 pimiento rojo
- 100 g de tomate frito
- 250 g de mayonesa casera
- 1 huevo
- Perejil
Cómo se elabora:
Asamos el pimiento en el horno o a la plancha.
Lo pelamos, le quitamos el tallo y las semillas y lo cortamos en tiras.
Cocemos el huevo en agua hirviendo con sal durante 10 minutos. Una vez cocido, lo dejamos enfriar, lo pelamos y separamos la yema de la clara.
Introducimos el pimiento asado en el vaso de la batidora, añadimos la mayonesa, la yema del huevo, la salsa de tomate y el perejil finamente picado.
Trituramos con la batidora hasta que se forme una salsa homogénea.
Vertemos la salsa en un bol, tapamos y enfriamos en el frigorífico durante al menos 30 minutos.
Usamos para aliñar pescados, ensaladas, huevos cocidos, etc.
Comentario dietético
No hay duda en que los platos que van acompañados de salsas tienen una jugosidad especial. El inconveniente que presentan es que las salsas se elaboran normalmente con alimentos de alto contenido en grasa y calorías, como la nata, el aceite y la mantequilla, por lo que el plato final resulta demasiado energético y con un aporte graso elevado. Por ello, se aconseja consumir estas preparaciones con moderación, para que no supongan un exceso de calorías en la dieta.
La salsa andaluza se elabora a partir de mayonesa, debido a ello su aporte graso y energético se considera elevado.
El pimiento y la salsa de tomate aportan la nota de color, y además son fuente de sustancias vegetales beneficiosas. Destaca entre ellas la vitamina C, que además de ser antioxidante, participa en otras importantes funciones en el organismo, como la formación de colágeno, huesos y dientes, y la resistencia a las infecciones. Por parte del tomate hay que mencionar la presencia de licopeno, un colorante natural cuyo consumo se relaciona con un menor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y degenerativas.