Cómo reconocer cuáles son nuestros verdaderos deseos? "Por las emociones que nos despiertan -responde la psicóloga María Nieves Vera-. Cuando elegimos de manera acorde con lo que realemente queremos, nos sentimos satisfechos con nosotros mismos. aun cuando corramos el riesgo de perder la aprobación de los demás. Estamos utilizando nuestro derecho a elegir por nosotros mismos y no por lo que la gente pueda esperar de nosotros."
El miedo a decepcionar a los demás o a perder su estima nos lleva, muchas veces, a escoger buscando la aprobación aajena en vez de actuar conforme a nuestros propios deseos y defender nuestros derechos. como nos recuerda Vera, visualizarnos actuando conforme a lo que creemos puede ayudarnos a reconocer nuestros deseos y a atrevernos a actuar de forma consecuente. "Hay varias técnicas de imaginación que nos pueden ayudar a querenos y a defender más nuestros derechos. Por ejemplo, podemos imaginarnos usando el derecho que no se está defendiendo y contemplar cómo cambia la vida, cómo se actúa, cómo se siente con uno mismo y con los demás... Y luego imaginar que ya no se tiene ese derecho. Esto ayuda a clarificar nuestras elecciones y a ser responsables de los resultados."
Las preguntas correctas
"Tener objetivos y fijarnos metas nos ayuda a saber qué decisiones hemos de tomar". Escribe Debbie Ford, psicóloga. Nos plantea que la clave para tomar decisiones es identificar nuestras metas y preguntarnos si nuestras elecciones nos acercan o nos alejan de ellas. "Las preguntas correctas nos permiten contemplar los hechos. ¿Esta elección me aportará fuerza vital? ¿Me acercará esto al futuro que espero? ¿Reforzará mi autoestima? Cuando nos hacemos estas preguntas antes de tomar una decisión y las respuestas son 'No, no y no', pero decidimos hacerlo de todos modos, al menos, tendremos claro que somos nosotros los que estamos saboteando nuestro futuro. Luego, en lugar de ser víctimas de nuestras circunstancias, podemos responsabilizarnos de ellas." Elegir de forma consciente y no dejarnos llevar sin más por automatismos o por el miedo a decepcionar a los demás es también una forma de asumir la responsabilidad de las circunstancias y, por tanto, de atrevernos a tomar las riendas de nuestra vida.
Buscar la coherencia
"Cuando decidimos que queremos ir hacia algún lado necesitamos coherencia. ¿Y qué es la coherencia? Pensar, sentir y actuar en la misma dirección", señala el psicólogo Walter Riso. "Cuando logras conectar las tres cosas todo parece claro".
Cuando una decisión corresponde a nuestra intención profunda, su simple evocación nos llena de emociones positivas. Dichas emociones nos ayudan a identificar nuestros verdaderos deseos, a preguntarnos si nuestras elecciones nos acercan o nos alejan de ellos y a actuar en consecuencia.
NURIA BERLANGA