Max Heindel, usando un traje marrón de corderoy barato, el que habia pagado diez dólares, trabajaba
a la par de los carpinteros como uno más de ellos. Fué afortunado por el hecho de que en esta etapa
su corazón no le traía demasiados problemas, a la vez, este era el tiempo en el que su gran energía
y ambición le hacian excepcionalmente aptos para el trabajo. Estaba tan entusiasmado y con tal ambición
que trabajaba con los carpinteros, pintores y cavaba ocho horas cada día, por lo que en la noche volvía
hambriento y cansado, pero lleno de alegría. La naturaleza de Max Heindel era particularmente excepcional,
pués a toda hora irradiaba alegría y buen ánimo, sin importar lo cansado que estuviera podía cantar con su
Al cabo de veintiocho días de trabajo el primer edificio estaba listo como para que los cinco trabajadores
se mudaran. Gran parte del mobiliario habia sido hecho por Rollo Smith. Había armado las mesas y escritorios
para la oficina y el comedor; también las mesas de las habitaciones de Max y Augusta Heindel eran de tablas
de madera de pino gigantezco de California. Solo casi un año antes las finanzas les habian permitido adquirir
un buen mobiliario, aunque mucho de los antigüos muebles debieron ser retenidos por un número de años.
Estos cinco trabajadores estaban felices por el hecho de mudarse a la casa terminada parcialmente
pero limpia (aunque parcialmente terminada), ya libre de insectos y roedores.
El día previo al de Acción de Gracias (1.911), las paredes estaban aún sin pintar y las ventanas fueron
colocadas sólo en las habitaciones en las que los trabajadores dormian; el resto de la construcción estaba
aún abierta - sin puertas ni ventanas. La maravillosa luz de luna atravezaba en las noches las ventanas
desnudas de los cuartos, a la vez que nos convertiamos en espectadores de los más hermosos cantos de los
coyotes de la zona, los que en grupos de hasta quince o veinte aullaban a la luz de la luna. Estos son
una especie de lobo pequeño del oeste de Norte América, rara vez atacan a humanos, pero son muy
destructivos de animales domesticos pequeños.
De ahora en más los líderes de La Fraternidad Rosacruz debian comenzar su edificio verdadero "espiritual ",
y como al fundar un edificio, debian comenzar cavando profundo en el trabajo arduo del verdadero pionero.
El Sr. Rollo Smith debió partir hacia Los Angeles, antes de terminar la edificación. Sin embargo, la misma
pudo ser habitada por Max Heindel, quién escribe y dos señoras que estaban colaborando.
Como oficina se habia diseñado una larga habitación y la parte este del edificio poseía dos pequeñas
habitaciones con grandes guardarropas entre ambas. Las camas eran las del tipo rebatibles, que al no
estar en uso podían ser guardadas por medio de un sistema de resortes, lo que economizaba en gran medida el
espacio. Estas camas podían ser guardadas en dichos armarios desde ambas habitaciones. Durante la noche estos
cuartos eran usados por el Sr. y la Sra. Heindel como dormitorios y durante el día como salas de recepción y
de trabajo, como el estudio en el que recibían visitas y en el cual hacían gran parte de sus escritos.
Había un baño conectado a la habitación del Sr. Heindel, con una puerta que también lo conectaba al comedor.
Pero en estas tierras apartadas no había ni gas, ni electricidad, por lo que el agua debía ser calentada
en una estufa de gasolina y transportada desde la cocina a través del comedor y al baño cada vez que alguno
de los residentes de las nuevas oficinas centrales deseaba tomar un baño.
La parte central de esta larga construcción estaba ocupada por un comedor y una cocina y el primer piso estaba
dividido en cinco habitaciones inconclusas, cada una con una cama, un lavabo casero y un vestidor sencillo.
Los muebles de la oficina habían sido hechos por el Sr.Smith, fueron teñidos todos de marrón de un colorante
que habia quedado de la pintura de la parte exterior.
El edificio entonces fue ocupado el día previo al de "Acción de gracias. "Ambas ayudantes, tanto la Sra.
Ruth Beach , como Rachel Cunningham, partieron en la mañana del día de "Acción de gracias " para estar
con amigos y familiares, mientras que el Sr. y la Sra. Heindel permanecieron para comer una sopa de vegetales,
pués la comida en ese entonces era realmente escasa. Esto se debía a que su automovil Bedalia estaba nuevamente
en reparaciones y el almacenero local se negaba a enviar provisiones tan lejos tierra adentro; por lo que a veces
estábamos realmente limitados en la elección de alimentos.
Así pasaron estas dos almas tan enérgicas el día de "Acción de gracias ", pintando adornos de madera y arreglando
mobiliario casero con fin de comenzar nuevamente la labor el lunes temprano una vez vueltos las dos ayudantes.