El amor es el don más grande que puede existir dentro de una persona. Es un poder tan grande
que es extensivo a individuos, familias, grupos, naciones. Su real grandeza se muestra en el
dominio de cada situación. Quien expresa amor, da de su alegría, interés, conocimiento, humor,
de todo lo que vive en cada uno. Tan pronto como una persona actúa en contra del amor, su
consciencia se afecta, su luz se apaga y la persona lo siente. Cuando Cristo bendijo los peces,
quería romper con el espíritu de aislamiento a través del espíritu
del universalismo. Cuando entendemos nuestra relación con el Cosmos, trascendemos
nuestras actividades separatistas.
Todo lo que existe manifestado es producto del amor. En la Biblia se nos dice que Dios es fuego
consumidor Porque Jehová tu Dios es fuego consumidor Dt. 4:24 y, que Dios es Amor
(I Juan 4:7). También, en nuestro Servicio de Templo, que Dios es Luz. La Vida es una misión,
y como tal, debe ser un continuo crecimiento en Cristo. Las energías que liberan poder para
servir, sacrificarse, amar, provienen de Cristo mismo. Si nos dejamos consumir por ese
fuego divino, empezaremos a desmantelar el viejo templo y empezaremos a ser luces en
el camino de todas las personas que se ponen en contacto nuestro, sin importar
diferencias de raza, color, o condición y empezaremos a construir nuestro templo con
numerosos actos de amor y servicio. Entre mas haya expresión del fuego divino, mas se
incrementa la alegría, la bendición y el entusiasmo porque el trabajo espiritual es un
desenvolvimiento sincronizado con el Plan Divino. A medida que limpiamos nuestros vehículos,
expandimos nuestra consciencia y funcionamos en planos superiores de nuestro ser. Por
tanto, recibimos más energía Cristica y transmitimos más dicha energía,
siendo ejemplos de la luz de Cristo.
Los mayores obstáculos de la evolución son los pensamientos, emociones y acciones
contrarios al amor. El gran desafío es QUE hacer y COMO hacer para ser dueño de mis
pensamientos: Que estén ocupados por recuerdos estimulantes, ideas positivas, ya
que todo lo que resistimos mentalmente lo convertimos en enemigo. Por lo tanto es un
gran tesoro, aprender el dominio de nuestra mente pues entre los efectos nocivos
para el cultivo del amor se hallan: La chismografía, que genera cortos circuitos en
el sistema eléctrico del aura. El aura del chismoso, se torna gris y negra. La crítica es producto de
la envidia, y busca disfrazarse para encontrar razones valederas. Quien odia debilita el potencial de
sobrevivencia de la humanidad, aprendamos a ver a esa persona como un maestro que
nos ayuda en nuestro crecimiento espiritual. De ahí la importancia de transformar enemigos
en amigos… o sea disecar los manantiales del sufrimiento. Esas son nuestras piedras en
el camino de lo espiritual. El miedo generalmente esta formado por sombras fantásticas sin
fundamento ni base en la realidad. (No me quiere…, me miró mal…y otras suposiciones
infundadas). La regla de oro es dejar que las cosas sean, aceptar, dejar ser. Entre menos amor,
menos vida. Entre más amor vida más abundante. El crimen más grande es la violación del amor.
Las siguientes cinco sustancias encienden el fuego de la vida. Primero, la gratitud, que
consiste en dar gracias por cada momento de nuestra vida, de todo lo que nos ocurre, es
como crear un templo en lo más profundo de nuestro corazón, lleno de bondad y compasión.
Analice de que cosas cada día debería estar agradecido. Un ejemplo real del efecto de
la gratitud en lo que nos rodea, se encuentra en el cristal del agua expuesto a la palabra
“gratitud” según comprobó el dr. Mazaru Emoto.
Segundo, el amor, que es dar sin esperar nada. Es aceptar las cosas que no puedo
cambiar. Hay algo de Judas en nosotros, creemos en el espíritu pero deseamos las cosas
de la materia. Tercero, la alegría: es una actitud del alma, más que una emoción, es la
sustancia de la luz del amor y de la belleza, que irradia colores, cuando se irradia alegría
se repelen fuerzas oscuras y se construye una cubierta protectora. Tercero, la bendición,
Cualquier cosa por inadecuada que parezca, bendícela, no importa si es falta de trabajo,
o de dinero, etc. Visualízala llena de la sustancia de Dios pues mientras mas consciente
se este de esta sustancia viviente, en mayor grado se te manifestara y para bien de todos.
Detrás de cada dificultad siempre hay una bendición. Y quinta, entusiasmo, sustancia
de la que hemos de llenarnos para que nuestras aspiraciones y metas se puedan alcanza
y poder decir como Cristo: consumatum est!
Para incrementar el poder del amor, tenemos a disposición una serie de herramientas.
He aquí algunas de ellas: la Libertad, Encontrar formas de que sus compañeros expresen
su luz interior, amor, y belleza por sus propios caminos y medios. No fuerce su voluntad
con lo que cree debe hacerse, estimule al otro a realizar cosas que son parte de su
visión. La no critica: Deje que cada persona florezca su propia flor con sus colores
originales. Cada vez que desee criticar remplácelo con pensamientos positivos, luego
encuentre algo que le guste en esa persona. Si encuentra que alguien esta haciendo
lo que ud. cree incorrecto, encuentre que lección positiva aprenderá la persona con
dicha experiencia. Admiración: La admiración equivale a regar
su jardín. Admire las buenas cosas de
sus compañeros diariamente. Sacrificio: Significa destruir dentro de nosotros todos los
pensamientos, hábitos, sentimientos, formas que no nos dejan progresar hacia una mas profunda
alegría y comprensión Haga una lista de limitaciones, elija como las va a disolver con
amor y belleza, trabaje diariamente hasta que termine Responsabilidad: Es responder
honestamente la pregunta: “mis actos, palabras y sentimientos aumentan la
felicidad alegría, la luz y la salud de quienes me rodean?
Si tu enemigo te parece tal porque revela tus transgresiones, injusticias y debilidades,
en el fondo es tu amigo camuflado, amale y aprende la lección que tiene que darte.
Recuerda que hay muchas perspectivas pero una sola dirección que es: Una vida vivida
para trabajar el plan divino, para expresar la finalidad divina y esta es una vida amorosa
y sacrificada por la causa de todo ser viviente. Todos los demás caminos
conducen a un punto de dolor y sufrimiento.
La vida es realmente un depósito sagrado y cada momento ha de aprovecharse sabiamente.
No esperes elogios para creer en ti mismo. Si quieres recibir, ya lo has recibido todo,
aprendamos a dar. Quizás nos quedemos con las manos vacías pero con un corazón
lleno de amor. Es nuestra vida, es nuestro presente, aquí y ahora.
En nuestro Servicio de Templo se cita la expresión del amor que nos da San Pablo:
El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el
amor no es jactancioso, no se envanece;
No hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no
guarda rencor;
No se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad.
Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y
cesarán las lenguas, y la ciencia acabará.
Porque en parte conocemos, y en parte profetizamos;
Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres;
pero el mayor de ellos es el amor.
Examinemos algunas de sus afirmaciones, por ejemplo, Todo lo sufre. El amor espiritual es
energía radiante que busca expresión en el plano físico. Esta expresión genera roce,
dolor, sufrimiento. Ej.: Los centros de la Fraternidad donde suele surgir desilusión, debido
al roce de personalidades aun no sujetas al espíritu. Benigno: significa, sufrir lo necesario
antes de herir. No es desagradecido ni celoso. No hiere de palabra ni con una mirada.
No tiene envidia: Porque reconoce el verdadero estado de la persona y sabe que a la
final todos bebemos de la misma fuente espiritual, según su capacidad para recibir. No
es jactancioso:, pues ve el mundo con ojos de tierna compasión. Sabe que todo se
extrae para enriquecer la vida espiritual, de uno y de los demás. No hace nada
indebido: Porque que es castidad, belleza, pureza, serenidad, energía radiante. No
busca lo suyo propio: porque el amor divino no es para si mismo. No se irrita:
Porque es inofensivo y se halla consagrado a objetivos elevados. Todo ataque
de palabra es venenoso y cruel, es un amor distorsionado. No piensa mal: Como
su esencia es pura, el amor de Cristo no puede pensar mal de ninguno. Cuando
amamos mal de otras personas, nos traicionamos a nosotros mismos. No se goza de
la injusticia mas se goza de la verdad: Porque su propósito es el desarrollo y
manifestación de la unidad. Todo lo espera: Porque la desesperación no tiene lugar
donde arde el fuego del amor divino. Y nunca falla: Porque
viene de Dios y si falla es deseo y no amor.
Un pensamiento final:
El más santo de todos los lugares sobre la tierra es aquel donde un viejo Odio,
se ha convertido EN UN AMOR PRESENTE.