El 2010 está nuevecito, pronto a ofrecernos cada día una nueva oportunidad de crecer en amor y sabiduría. Lo buenos deseos y la felicidad que en estas Fiestas hemos sentido, están simbolizados en esta velita encendida...
No permitamos que ella se apague en el interior de nuestra alma, recordemos que con el nacimiento de Jesús nosotros renacimos a una nueva vida de plenitud y alegría, pero "como vivimos en un mundo en el que la alternativa del dolor y la probabilidad de sufrimiento son posibilidades siempre presentes"51 hagamos también de ellas un camino hacia la perfección, porque el "las dificultades inflaman el ardor del amante de la verdad y los obstáculos sólo sirven de reto a los constructores intrépidos del reino"
Comencemos el año llenos de optimismo, porque somos dueños de nuestro destino y podemos hacer de este 2010 lo que realmente QUERAMOS, porque con la ayuda de Dios ¡todo es posible!
yolanda silva solano