La comprensión progresiva de la realidad, es el equivalente de acercarse a Dios. La conciencia de la identidad con la realidad, es el equivalente de experimentar el yo completo. La experiencia de la realidad total es la realización plena de Dios y la finalidad de la experiencia conocedora de Dios.
Libro de Urantia. Pág.2094
La espiritualidad no puede estar ajena a la realidad espiritual y material de cada persona, porque cada uno debe evolucionar con las herramientas que la maestra vida le ha dado para hacerlo y que son diferentes en cada caso.
Cada quien debe encontrar a Dios en sí mismo y por sí mismo, porque nadie, ni siquiera Dios puede evolucionar por nosotros, pues la perfección es equivalente a la religión personal y ella es la actitud de un alma individual, en sus relaciones conscientes con el Creador."La experiencia evolutiva comienza aquí en la tierra y va progresando a través de las estaciones sucesivas de vida, hasta llegar al Paraíso" 1603 pero esta carrera espiritual tanto aquí como en los mundos de estancia, siempre será individual, porque cada ser es diferente a todos los demás.
La evolución espiritual no es algo que se adquiera en forma repentina después de una meditación, este puede ser el primer paso para acercarnos a la verdad, pero la espiritualidad se adquiere en la medida que gracias a nuestro esfuerzo personal constante, somos capaces de dar los frutos del espíritu en nuestra vida cotidiana.
Podemos tener una gran erudición para hablar sobre el Libro de Urantia, pero eso de nada nos servirá si en cada uno de nuesros semejantes no somos capaces de descubrir al hijo de Dios que en él habita. ¿De qué nos sirve tener conciencia de las Personalidades y la labor que ellas ejercen en los universos, si nosotros no cumplimos con nuestra misión de amar a nuestros hermanos como Dios nos ama a nosotros? El conocimiento de la más grande de las verdades ¿de qué puede servirnos para evolucionar si no somos capaces de perdonar una ofensa?
No no engañemos, no puede haber evolución posible, mientras no aceptemos nuestra identidad y nuestras propias realidades, pues es sólo a través de ellas que "la mente del hombre se vuelve mediadora entre las cosas materiales y las realidades espirituales."1779 porque ellas no pueden ir separadas, porque aislar parte de la vida y llamarla religión es desintegrar la vida y distorcionar la religión"1124 y es precisamente esta dicotomía en nuestras vidas, la que nos impide evolucionar para transformarnos en sal de la tierra, capaz de cambiar las realidades de nuestro mundo actual.
yolanda silva solano