Tengo un gran amigo, se llama Luis.
Cuando le conocí formaba parte de un grupo de personas que estaban formándose en diferentes terapias, al poco tiempo dejó de hacerlo, tenía un buen motivo: "Ahora voy a practicar" se dijo.
Entre risas me decía que no quería parecerse a un fontanero con una gran caja de herramientas pero que solo la abría para meter mas y mas herramientas, que prefería utilizar las que tenía antes que seguir arrastrando una caja cada vez mas pesada y no utilizar ninguna.
Quizás sea esa la diferencia entre conocer y saber.