SÚPLICA AL HERMANO TERRORISTA
Si crees que tienes la razón, dialoga.
Nadie te va a negar el escucharte.
Pero, escucha también,
y piensa y reflexiona y monologa
y trata de evitar equivocarte:
Busca, ante todo, el bien.
La violencia, la fuerza y la pistola
no convencen a nadie sobre nada
y tú has de convencer.
¿De qué te sirve estar sobre la ola
si no tienes razón, y equilibrada
vendrá de nuevo a ser?
¿Por qué has de asesinar a tus hermanos
sin darles ocasión de comprenderte?
¿No sería mejor
Mostrar que tus trasfondos son humanos
y discutir, pensar, robustecerte
con más amor?
Tiende tu mano sin rencor ninguno
y toma la ofrecida por tu hermano
y siente su calor…
y caminad así los dos cual uno,
sincronizando corazón y mano
sin miedo y sin rencor…
Porque, ¿tú ves el fin de lo que haces?
¿A quién calculas tú que servirá?
¿Por quién te expones?
¿No descubres los tétricos disfraces
de amor por odio? ¿Quién aceptará
tales razones?