No hacer el mal no es suficiente, mis discípulos deben aprender a hacer el bien.
Libro de Urantia. Pág.1736

En camino espiritual es tan fácil el conformarse con lo que creemos haber adquirido de unas cuantas lecturas, o con el trato con algunos llamados maestros o contactados, alimentando así nuestro ego y nuestro intelecto, pero dejando hambriento y sediento a nuestro Espíritu residente, porque él sólo puede aprovechar nuestras acciones conscientes que resalten nuestros cambios internos. No podemos hablar en una reunión de la tolerancia y llegar a casa reclamando por cualquier cosa o siendo intolerantes con los que no piensan como nosotros, porque no podemos olvidar que "el plan de la enseñanza, es aprender y luego poner en práctica lo aprendido.1658"
Desgraciadamente no es lo que solemos hacer, nos auto engañamos creyendo que no haciendo abiertamente el mal es suficiente para ser espirituales, pero es un grave error, porque no es eso lo que nuestro Padre espera de nosotros, él quiere que aprendamos a volar alto y no siguiendo a la bandada, sino que despleguemos nuestras alas y busquemos a Dios en nosotros y por nosotros mismos.
Jesús dijo "que sus discípulos no podían quedarse inmóviles; debían seguir adelantando en rectitud o retroceder en el mal y el pecado. Les advirtió que olvidaran esas cosas que están en el pasado, y lucharan por adelantarse hasta abrazar las realidades más grandes del reino». Les imploró que no se conformaran con ser niños en el evangelio sino que lucharan por alcanzar la estatura plena de la filiación divina en la comunión del espíritu y en la hermandad de los creyentes.1736"
Personalmente, me impresiona el empeño que el Maestro pone en repetirnos una y otra vez, que la filiación divina debe estar íntimamente unida a la hermandad , la una sin la otra no tienen ningún valor, porque es por este motivo que vemos las iglesias repletas de fieles una vez a la semana, pero el mundo no consigue cambiar y crece la violencia, la injusticia y el pecado.
"¿Cuánto le llevará al mundo de los creyentes comprender que la oración no es un proceso para conseguir lo que uno quiere, sino más bien un proceso para aceptar el Camino de Dios. 1946 y que éste, pasa necesariamente por el amor verdadero no a algunos, sino a todos nuestros hermanos porque "si tan sólo apredéis a amar a los que os aman, estaréis destinados a vivir una vida limitada y mezquina, porque la religión es una experiencia exclusivamente espiritual del alma inmortal evolutiva del hombre conocedor de Dios, pero el poder moral y la energía espiritual, son fuerzas poderosas que pueden ser utilizadas para tratar situaciones sociales difíciles y resolver problemas económicos complicados. Estos dotes morales y espirituales, enriquecen todos los niveles del vivir humano y los hacen más significativo. 1739 porque requieren del contacto con nuestros semejantes.
Ojalá nuestra súplica constante fuese : Señor, no permitas que me quede donde estoy. Ayúdame a llegar donde Tú esperas que llegue... poque así nos libraríamos de esa rutina religiosa que duerme a nuestra conciencia.
yolanda silva solano.