Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

EL VISLUMBRAR DE LA ERA DE ACUARIO
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 General 
 NAVIDAD 2.016 
  
 ¿QUE ES LA VERDAD? 
  
 EL EMBLEMA ROSACRUZ & The Rosicrucian Emblem 
  
  
  
 HERMANOS MAYORES 
 THE BROTHERS OF THE ROSE CROSS 
 The Rosicrucian Fellowsihip (CURSOS) 
 MAX HEINDEL 
 NORMAS DEL VISLUMBRAR 
  
 AUGUSTA F. DE HEINDEL 
 CORINNE HELINE 
 ADMINISTRACION 
  
  
  
 BIBLIOTECA ROSACUZ 
 MANLY P. HALL 
  
 PREG Y RESP. R.C. 
 FOLLETOS ROSACRUZ 
 LINKS ROSACRUCES 
  
 ROBERTO RUGGIERO 
  
 FRANCISCO NÁCHER 
 ALEXANDRA B. PORTER , 
 JOSÉ MEJIA .R 
 MARTA BRIGIDA DANEY 
 LIBRO DE URANTIA 
 SALUD Y CURACION 
 CUENTOS PARA NIÑOS 
 EL SITIO DE ACSIVAMA 
  
 NOTAS AL INTERIOR 
 LA BELLEZA DE LA VIDA 
 TUS REFLEXIONES 
 BIBLIOTECA 
 PPS ESOTERICOS 
 MUSICA 
 GRUPOS Y AMIGOS 
  
  
 Señor, haz de mi un instrumento de tu paz. 
 LA MORADA DE JESÚS 
  
 
 
  Herramientas
 
LIBR. DE URANTIA: Del vivir religioso
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: leozarrua  (Mensaje original) Enviado: 04/12/2010 15:40
LAS MARCAS DEL VIVIR RELIGIOSO

     Las religiones evolucionarias y las religiones revelatorias pueden diferir considerablemente en sus métodos, pero en su motivo hay una gran similitud. La religión no es una función específica de la vida; más bien es una forma de vida. La verdadera religión es una devoción incondicional a una realidad que el religionista considera de valor supremo para él y para toda la humanidad. Las características sobresalientes de todas las religiones son: lealtad incondicional y devoción sincera a los valores supremos. Esta devoción religiosa a los valores supremos se demuestra en la relación de la madre supuestamente no religiosa hacia su hijo y en la lealtad ferviente de los no religiosos a una causa abrazada.

     El valor supremo aceptado por el religionista puede ser bajo o aun falso, pero es sin embargo religioso. Una religión es genuina en cuanto el valor que se considera supremo es verdaderamente una realidad cósmica de genuino valor espiritual.

     Las marcas de la respuesta humana al impulso religioso comprenden las cualidades de la nobleza y la grandeza. El religioso sincero tiene conciencia de una ciudadanía en el universo y es consciente de ponerse en contacto con las fuentes de poder sobrehumano. El religionista está impulsado y energizado por la seguridad de pertenecer a una hermandad superior y ennoblecida de hijos de Dios. La conciencia del valor de su propio yo va aumentada por el estímulo de la búsqueda de los objetivos universales más elevados —las metas supremas.

     El yo ha cedido al fascinante impulso de una motivación que todo lo abarca, que impone una mayor autodisciplina, disminuye el conflicto emocional y hace que la vida mortal valga realmente la pena vivir. El reconocimiento morboso de las limitaciones humanas se transforma en la conciencia natural de las limitaciones mortales, asociadas con la determinación moral y la aspiración espiritual de lograr los fines universales y superuniversales más elevados. Y esta intensa lucha por el logro de los ideales supermortales está siempre caracterizada por una mayor paciencia, fuerza y tolerancia.

     Pero la verdadera religión es amor vivo, una vida de servicio. La separación del religionista de mucho de lo que es puramente temporal y trivial no conduce nunca al aislamiento social y no debería destruir jamás el sentido del humor. La marca de la religión genuina no quita nada de la existencia humana, sino que agrega nuevos significados a la vida entera; genera nuevos tipos de entusiasmo, fervor y valentía. Aun es posible que engendre el espíritu del cruzado, que es más que peligroso si no está controlado por la visión espiritual y la devoción leal a las obligaciones sociales comunes de las lealtades humanas.

     Una de las características más sorprendentes de la vida religiosa, es esa paz dinámica y sublime, esa paz que trasciende toda comprensión humana, esa calma cósmica que simboliza la ausencia de toda duda y confusión. Tales niveles de estabilidad espiritual son inmunes a la decepción. Estos religionistas son como el apóstol Pablo, quien dijo: «Estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa nos podrá separar del amor de Dios».

LU 1100

     Existe un sentimiento de seguridad, asociado con la realización de la gloria triunfante, que reside en la conciencia del religioso que ha captado la realidad del Supremo, y que persigue el objetivo del Último.

     Aun la religión evolucionaria es enteramente así en lealtad y grandeza, porque es una experiencia genuina. Pero la religión revelatoria es excelente como también genuina. Las nuevas lealtades de la visión espiritual ampliada crean nuevos niveles de amor y devoción, de servicio y hermandad; y toda esta visión social enaltecida produce una conciencia, cada vez más amplia, de la paternidad de Dios y de la fraternidad del hombre.

     La diferencia característica entre la religión evolucionada y la religión revelada consiste en una nueva calidad de sabiduría divina que se agrega a la sabiduría humana puramente experiencial. Pero es la experiencia con las religiones humanas la que desarrolla la capacidad para la recepción subsiguiente de los dones en aumento de la sabiduría divina y de la compenetración cósmica.



Primer  Anterior  Sin respuesta  Siguiente   Último  

 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados