La religión es primero una adaptación interior y personal, y luego se vuelve un asunto de servicio social o de adaptación de grupo.
Libro de Urantia. Pág.1107
La enseñanza del LU insiste mucho en que la verdadera religión es personal y nace del propio Espíritu, pero eso en ningún caso quiere decir que es una religión que debemos vivir en solitario y en donde nuestra única preocupación sea la evolución individual, porque el aislamiento nunca es bueno porque es encerrarse en una burbuja que nos impide ver la realidad tal cual es, ya que "el aislamiento tiende a agotar la carga de energía del alma. La asociación con los semejantes es esencial para mantener el entusiasmo por la vida, e indispensable para alimentar la valentía necesaria en las batallas inherentes a la ascensión a los niveles más altos del vivir humano. La amistad intensifica el gozo y glorifica los triunfos de la vida. Las asociaciones humanas amantes e íntimas, tienden a liberar al sufrimiento de su pesadumbre y a la dificultad de mucho de su amargura. La presencia de un amigo aumenta toda belleza y exalta toda bondad. Por medio de símbolos inteligentes, el hombre es capaz de acelerar y ampliar la capacidad de apreciación de sus amigos. Una de las glorias máximas de la amistad humana es este poder y posibilidad de estimulación mutua de la imaginación. Hay gran poder espiritual inherente en la conciencia de una devoción absoluta a una causa común y a la lealtad mutua a Dios.1776"
Pero no sólo debemos buscar la compañía de los amigos, porque se supone que con ellos tenemos afinidades que nos acercan, pero "si tan sólo aprendéis a amar a los os aman, estaréis destinados a vivir una vida limitada y mezquina. Por cierto, el amor humano puede ser recíproco, pero el amor divino, en toda su busca de la satisfacción, se dirige hacia afuera. Cuanto menos amor haya en la naturaleza de una criatura, más grande será su necesidad de amor y más tratará el amor divino de satisfacer esa necesidad. El amor no es jamás egoísta, y no puede ser autorregalado. El amor divino no puede ser autocontenido; debe ser donado generosamente 1739" por eso nuestra atención, nuestra empatía, nuestra alegría y dulzura debe ser ejercida con todo áquel que a nosotros se acerque, especialmente con aquellos que en algún sentido aparente son menos que nosotros, como es el jardinero, la nana, el dependiente del súpermercado, el cuidador de autos, las promotoras... personas que están obligadas a hacer un trabajo duro, monótono y anónimo. Para ellos una pequeña conversación, un gracias dado de corazón, un pequeño halago, una sonrisa... son sorpresas que les tonifican el corazón y que le rompen la rutina. Estos ejemplos pueden parecer pueriles como una forma de evolucionar espiritualmente, sin embargo a los ojos de Dios no lo son, porque todo lo que hacemos por el más humilde de nuestros hermanos se lo hacemos a El.
La religión del espíritu es una paradoja, porque si bien tiene que ser individual y conforme al propio discernimiento, a la vez no funciona separada del individuo y de su condción humana, porque es cierto que "la religión es la experiencia exclusivamente espiritual del alma inmortal evolutiva del hombre conocedor de Dios, pero el poder moral y la energía espiritual son fuerzas poderosas que pueden ser utilizadas para tratar situaciones sociales difíciles y resolver problemas económicos complicados. Estas dotes morales y espirituales enriquecen todos los niveles del vivir humano y los hacen más significativos.1740"
Son los pequeños detalles cotidianos, los que realmente nos hacen despertar del sueño de creernos espirituales cuando no lo somos, porque nadie puede dar lo que no tiene y si no entregamos a los demás algo de lo mucho que hemos recibido, estamos siendo avaros, y como el siervo de la parábola de los talentos, estamos enterrando el tesoro recibido en vez de hacerlo fructificar. Del mismo modo, cada vez que compartimos nuestro tesoro no sólo nos enriquecemos más nosotros, sino que a la vez estamos esparciendo amor, que a su vez va a florecer en otras almas. Tenemos que convencernos que el mundo no va a cambiar por medio de leyes, por buenas que ellas sean. sino que los cambios tienen que venir del cambio de nuestras conciencias y en la medida que la hermandad no sea una palabra, sino que se haga una realidad en la ejecución de nuestras actos cotidianos.
La religión sin conciencia social es un gran autoengaño, porque "no es posible regocijarse en la paternidad divina si se ignora la fraternidad de los hombres.1454" pero la conciencia social que se nos pide no es la de la limosna ocasional, sino el amor y la caridad entregada a diario, porque muchas veces los que más necesitan de nuestra empatía y comprensión son los que más dinero y comodidades tienen, porque por un orgullo mal entendido sienten rubor de mostrarse débiles en cualquier aspecto.
Recordemos que "la fe de sobrevivencia es una fe viva, y cada vez manifiesta más frutos de ese divino espíritu que la inspira en primer término en el corazón humano. El que hayáis aceptado cierta vez la filiación en el reino celestial, no os salva si persistentemente y a sabiendas rechazáis aquellas verdades que tienen que ver con los frutos espirituales de los hijos de Dios en la carne. No podéis estaros quietos en los asuntos del reino eterno. Mi Padre requiere que todos sus hijos crezcan en la gracia y en el conocimiento de la verdad. Vosotros que conocéis estas verdades debéis rendir cada vez más los frutos del espíritu y manifestar una devoción creciente al servicio altruista de vuestros conservidores. Y recordad que, cuando ministréis aun al más humilde de mis hermanos, hacéis ese servicio para mí.1916" y tiene muchísimo más valor que una oración repetida sin conciencia de lo que estamos diciendo.
yolanda silva solano