Todos los hombres son mis hermanos. Mi Padre celestial no menosprecia a ninguna de las criaturas de nuestra creación
Libro de Urantia. Pág.1541
Deberíamos empoderarnos de esta cita, pues muchas veces actuamos como si fuésemos superiores a nuestro Padre, porque en la práctica no consideramos a todos los hombres iguales, por el contrario los discriminamos ya sea por su raza, condición social o sexual y nos damos el lujo de menospreciarlos, puede que no lo hagamos de palabra, pero si con nuestras conductas y nuestro juicio descalificador.
En esta ocasión me voy a referir a lo que está más en la palestra, que es el matrimonio entre personas del mismo sexo, tema que no puede estar ajeno a nuestra evolución espiritual, porque Jesús nos dijo "mientras os dedicáis a la obtención de las realidades eternas, también debéis disponer para las necesidades de la vida temporal. 1778. Como siempre lo hago, basaré mis planteamientos sobre las enseñanzas del Libro de Urantia, pero con una interpretación absolutamente personal y sin el ánimo de convencer a nadie, pues creo que "cada ser humano define la religión, en términos de su propia interpretación experiencial y por lo tanto esta interpretación debe ser única y totalmente distinta de la filosofía de todos los demás seres humanos.1130
Pienso que el matrimonio es una institución fundada por el hombre, la cual ha ido cambiando según las costumbres de la época pues " las costumbres matrimoniales se han apoyado tanto en la propiedad privada, como en la religión; pero la verdadera influencia que por siempre protege el matrimonio y la familia consecuente, es el simple e innato hecho biológico de que los hombres y las mujeres no vivirán los unos sin los otros, sean ellos los salvajes más primitivos, o los más cultos mortales. 922
" La familia humana es una institución claramente humana, un desarrollo evolucionario. El matrimonio es una institución de la sociedad, no una dependencia de la iglesia. Es verdad que la religión debe influir poderosamente sobre esta institución, pero no debe adjudicarse el derecho exclusivo de su control y reglamentación.922. Un papel ya sea firmado ante las leyes religiosas o civiles, no es capaz de unir en forma real y duradera a una pareja porque "el matrimonio ideal debe ser fundado en algo más estable que las fluctuaciones del sentimiento y la transitoriedad de la sola atracción sexual; debe basarse en la devoción personal genuina y mutua del amor. 1777
Hoy en día vemos que aumentan los divorcios y escasean los matrimonios, porque la juventud actual prefiere convivir sin reglas establecidas y muchas de estas parejas se consolidad verdaderamente en el tiempo, lo que está demostrando que el matrimonio en sí mismo, puede ser una garantía en cuanto a los bienes materiales y frente a la sociedad, pero no en cuanto a los sentimientos.
Los homosexuales seguiran existiendo y conviviendo, con o sin matrimonio civil. Si éste causa tanto revuelo, es porque para ellos, es una conquista de sus derechos humanos como personas, que desean que ser reconocidas socialmente. Lo cual me parece justo, pero más que estás conquistas humanas, creo que ellos y nosotros deberíamos convencernos que también son hijos de Dios, al igual que lo somos nosotros, porque para entrar en el Reino, el motivo es el que cuenta, porque "la humanidad se puede clasificar con propiedad en muchas clases conforme a diferentes calificaciones, desde un punto de vista físico, mental, social, vocacional o moral, pero cuando estas diferentes clases de mortales comparecen ante el tribunal de Dios, lo hacen en igualdad de condiciones. Dios en verdad no tiene favoritos. Aunque no sea posible escapar al reconocimiento de las diversas capacidades y dotes humanas, en asuntos intelectuales, sociales y morales, no deberías hacer tales distinciones dentro de la fraternidad espiritual de los hombres, cuando se reúnen para adorar en la presencia de Dios».1408"
No me siento con autoridad alguna para aprobar o desaprobar la conducta de los homosexuales, pues sólo ellos saben los verdaderos motivos de su condición, pero como orientadora me ha tocado conocer y tratar de ayudar a homosexuales, y me he dado cuenta que sufren mucho, porque no es una opción que ellos libremente hayan escogido y porque he conocido muy de cerca, sus verdaderos deseos de perfección y su amor a Dios, me pregunto ¿quienes somos nosotros para juzgarlos? "En el universo, el juicio está investido sobre aquellos que conocen plenamente los antecedentes de todos los males, así como también sus móviles. En la sociedad civilizada y en un universo organizado, la administración de la justicia, presupone el dictamen de una sentencia justa, después de un juicio justo, y esta prerrogativa corresponde a los grupos jurídicos de los mundos y a los administradores omnisapientes de los universos más altos de toda la creación.1408
Jesús nos enseñó que "la puerta de la vida eterna, está abierta de par en par. Todo el que quiera puede venir, no hay restricciones ni calificaciones, salvo la fe del que viene. 1567" Todos los hombres son mis hermanos. Mi Padre celestial no menosprecia a ninguna de las criaturas de nuestra creación. Ningún hombre puede cerrar la puerta de la misericordia a un alma hambrienta que procura entrar. Nos sentaremos a comer con todos los que deseen oír sobre el reino. A los ojos de nuestro Padre que nos contempla desde lo alto, todos los hombres son iguales. No os negaréis pues a romper el pan con un fariseo o un pecador, un saduceo o un publicano, un romano o un judío, un rico o un pobre, un hombre libre o un esclavo. La puerta del reino está abierta de par en par para todos los que deseen conocer la verdad y encontrar a Dios. 1541. ¡Cuan diferente es la amplitud de criterio del Maestro a la que ostentamos los que nos llamamos cristianos! Mientras El abre de par en par las puertas de la salvación eterna y nos dice que en la casa de su Padre hay muchas moradas, nosotros somos terriblemente selectivos y nos adueñamos de la verdad, de la religión y también de la tendencia sexual de cada individuo.
Dijo Jesús: «Veis pues que el Padre otorga salvación a los hijos de los hombres, y esta salvación es un don para todos los que tienen la fe necesaria para recibir la filiación en la familia divina. No hay nada que el hombre pueda hacer para merecer esta salvación. Las obras de mojigatería no compran el favor de Dios, las oraciones públicas no expían la falta de fe viviente en el corazón. Podréis engañar a los hombres con vuestro servicio exterior, pero Dios mira dentro de vuestra alma.1838 Entonces ¿no sería mejor para nosotros dejar que sea el Padre quien juzgue lo que no podemos comprender y que nosotros nos dediquemos a practicar la hermandad, con quienes nos necesitan tal vez más que muchos otros?
"En el reino de la hermandad creyente de los amantes de la verdad conocedores de Dios, esta regla de oro adquiere cualidades vivas de comprensión espiritual, en aquellos niveles más altos de interpretación que hacen que los hijos mortales de Dios consideren esta admonición del Maestro como que se requiere de ellos que se relacionen con sus semejantes de una manera que permita el más alto bien posible, como resultado del contacto de los creyentes con esos semejantes. Ésta es la esencia de la verdadera religión: amar a vuestro prójimo como a vosotros mismos. 1651
Pienso que así como las mujeres hemos tenido que luchar durante tantos siglos para que se reconozcan nuestros derechos, también las minorías sexuales, tienen el mismo derecho a ser respetados, porque soy una convencida que la inmensa mayoría no tienen otra opción, porque nacieron con esas inclinaciones diferentes que la gran mayoría de las veces les resulta muy dolorosa, debido a la discriminación que de ellos se hace y por su propio sentimiento de culpa.
Sin embargo, con la misma franqueza que me referido al matrimonio gay, tengo que decir que no estoy de acuerdo con la adopción de hijos, pues creo que es obligar a un niño a un ambiente anormal, porque tanto el papel del padre, como el de la madre son únicos e irreemplazables como figuras masculina y femenina. Además es obligar a un nuevo ser a tener desde sus inicios un handicap en contra
Interpretación muy personal de las enseñanzas del Libro de Urantia.
yolanda silva solano