Cuando la voluntad de mi Padre se hace vuestra voluntad y seréis elevados a la alta posición de hijos de Dios, hijos liberados del reino”
Libro de Urantia. Pág.1589.
“Sólo cuando la voluntad del Padre se hace verdaderamente vuestra voluntad, entonces estaréis vosotros en verdad en el reino, porque el reino se ha tornado de esta manera una experiencia establecida en vosotros. Cuando la voluntad de Dios es vuestra ley, sois nobles súbditos esclavos, pero cuando creéis en este nuevo evangelio de filiación divina, la voluntad de mi Padre se hace vuestra voluntad y seréis elevados a la alta posición de hijos libres de Dios, hijos liberados del reino” 1589.
Hay una gran diferencia en hacer la voluntad de Dios por miedo al castigo divino o humano, a hacer lo que está bien por amor a Dios y a nuestros hermanos, porque entonces deja de ser una obligación y se transforma en algo que nos da felicidad, porque "cada día que vive un verdader creyente, le resulta más fácil el hacer lo que es recto."1740
Cuando la voluntad de Dios se transforma en ley, nos transformamos en niños que necesitamos de la severidad y del castigo, en cambio cuando la voluntad del Padre se transforma en nuestra voluntad, somos adultos con el don del libre albedrío y dueños de nuestro destino, pues " la rectitud expenencial es un placer, no un deber."1574
Así pues, “hacer la voluntad de Dios no es ni más ni menos, que una exhibición de la disposición de la criatura a compartir la vida interior con Dios, con el mismo Dios que ha hecho posible esa vida de valor y significado interior de la criatura”. “La imitación de Dios, es la clave para la perfección, hacer su voluntad es el secreto de la perfección en la supervivencia” 1221 y de una vida mucho más plena y feliz mientras estamos estamos en nuestra envoltura humana.
yolanda silva solano