Gracias, Señor, muchas gracias por todos los dones que me entregas.
Gracias por todo lo que vi, escuché y recibí.
Por el agua que me lava, por la ropa que me viste, por el pan que me sustenta.
Por la casa, por los padres, por los hermanos y amigos.
Por los conocimientos, esfuerzos y trabajos.
Por el tiempo que me diste, por la vida que me ofreces, por la bendición de todos los días.
Gracias por estar conmigo, Señor. Gracias porque me escuchas y me tomas en serio.
Gracias porque recibes mi agradecimiento de hoy. Gracias, Señor, muchas gracias. Amén