He vivido mi vida en la carne para mostraros cómo podéis ser, a través del servicio amoroso, una revelación de Dios para vuestros semejantes, al igual que yo he sido, amándoos y sirviéndoos, una revelación de Dios para vosotros
Libro de Urantia. Pág.2053
Jesús no vino a enseñarnos cosas extraordinarias, no vino a activar el tercer ojo, ni a instruirnos como levitar, El con su vida vino a enseñarnos que para unirnos a nuestro Padre, no se necesitan mayores conocimientos que nos hagan parecer más eruditos ante los demás, simplemente con su ejemplo nos enseñó que la revelación de Dios, sólo era posible alcanzarla en la misma medida que nosotros comprendiéramos su importancia y pusiéramos en práctica el servicio con nuestros hermanos como El, que no hizo distingo entre judíos y fariseos, ni entre la mujer samaritana, ni la mujer adúltera, ni entre sus amigos ni entre sus enemigos, porque con el mismo amor perdonó a Pedro por sus negaciones provocadas por el temor, como a sus enemigos que lo crucificaron, disculpándolos ante su Padre y pidiendo su perdón porque no sabían lo que hacían.
El servicio va mucho más allá de el dar una lismona o prestar una ayuda esporádica de cualquier tipo, el servicio que Jesús nos pide es que cualquier acción por pequeña que ella sea, la hagamos en forma consciente y envuelta en el amor y la ternura. Esta última palabra es tan poco usada y menos aún practicada en los tiempos apurados en que vivimos. Nadie podría decir que los padres normales no aman a sus hijos, pero en el trato cotidiano ¿cuántas veces manifiestan la ternura de una caricia, de una respuesta sonriente y edificadora, de un darse el tiempo para escucharlos? Entre los esposos ocurre algo parecido, las caricias y la ternura se manifiesta la gran mayoría de las veces sólo a través de los momentos previos a la intimidad sexual ¿pero que hay de la vida cotidiana?
El amor se puede sentir en silencio del corazón, en cambio la ternura es algo espontáneo que necesita ser demostrada a través de gestos y actitudes visibles que no necesitan de ningún momento determinado, pero que hay que poner mayor énfasis cuando se presenta la ocasión de demostrar el amor.
Ejercitar la ternura como un servicio a nuestros hermanos debería ser nuestra tarea. Manifestar ternura en nuestras palabras de agradecimiento para con el que a todo el sol, o bajo la lluvia nos cuida el auto. Tener una palabra amable y sonriente para los vendedores de las tiendas que están todo el día de pié y que deben ser atentos con todos los clientes a riesgo de ser despedidos... tener una palabra cariñosa y agradecida para con nuestras asesoras del hogar, porque gracias a las "nanas" nuestra casa funciona bien y nuestros hijos tienen quien los cuide,
Muchos pueden pensar que estas son niñerías y que el LU tiene tópicos mucho más importantes que tratar, que éstos que debieran darse por sabidos...pero es que desgraciademente no es así, podemos saber mucho sobre las Personalidades, pero se nos olvida comprender, perdonar y empatizar con nuestros hermanos y con los que no opinan o no piensan como nosotros. Jesus es reiterativo, quien no ama a sus hermanos a quienes puede ver, no puede amar al Dios invisible, porque "aislar parte de la vida y llamarla religión, es desintegrar la vida y distoricionar la religión.1124
"Tener sensibilidad y saber responder a las necesidades de los hombres es una felicidad genuina y duradera."1575 No basta servir a nuestros hermanos, es preciso que este servicio sea amoroso y tierno, para que seamos "una revelación de Dios para vuestros semejantes.2053"
yolanda silva solano.