"La existencia está en perpetuo movimiento. Aunque hoy solamente tengamos que proseguir las actividades del día anterior, ninguna jornada se presenta con idénticas condiciones.
De un día para otro, ¡cuántas cosas pueden cambiar! En el trabajo, en la familia, en la sociedad, siempre hay que adaptarse. Y, si no estamos preparados, ahí están las sorpresas, y ya sabemos los efectos producidos por las situaciones que no nos esperábamos: dudas, trastornos, agitación, errores...
Cada día nos trae, pues, nuevos problemas a resolver. Pero ¿cómo vas a poder resolverlos si no has sacado en claro lo que has vivido el día anterior?
Sólo puedes estar seguro del mañana si hoy tratas de consolidar las bases de tu vida psíquica; y las podrás consolidar revisando los acontecimientos de la jornada, reflexionando sobre la forma en que los has vivido para poder obtener lecciones de los mismos.
Todo depende de tu capacidad de organizar tu mundo interior. Es esta organización la que se reflejará en tu percepción de las cosas: cuando el mañana llegue, los acontecimientos te encontrarán preparados y decididos."
(Omraam M. Aivanhov)
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