"¡Cuántas veces oímos repetir que la libertad es el bien más precioso! ¡Y cuánto han luchado los humanos, y siguen luchando aún para conquistarla! Muchos incluso han sacrificado su vida. Pero, ¿qué hacen los humanos cuando ya son libres? Se diría que esta libertad les pesa, no saben qué hacer con ella.
Ahora que ya no tienen nada contra quién o contra qué luchar, que ya nada les impide desplazarse, actuar y expresar sus opiniones, se aburren, y para distraerse se meten en situaciones complicadas. ¡Cuántas veces lo hemos visto! La libertad es la mejor de las cosas, pero sólo si se dan ciertas condiciones. ¿Queires ser libre? Pregúntate primero qué vas a hacer con esta libertad.
¿De qué te servirá poder ir y venir libremente, si transportas contigo pensamientos, sentimientos y deseos que te atan y que acabarán postrándote en la cama?
La única libertad que vale la pena conquistar, es la libertad interior: es la que te permitirá descubrir las verdades esenciales que necesitas para poder orientarte y sostenerte en la vida. Todas las maravillas del cielo y de la tierra están ahí, a tu alrededor, dentro de ti... pero, para verlas, para comprenderlas, debes ser libre, libre interiormente."
(Omraam M. Aivanhov)