No hay
vocaciones que sean santas y otras seculares, pues todas las cosas son sagradas
en la vida de los que son conducidos por el
espíritu.
Libro de
Urantia. Pág.1732
Es bueno
recordar esta cita en este día que celebramos con un feriado el Día
Internacional de los trabajadores, porque al hacerlo estamos reconociendo el
valor inmenso que el trabajo tiene, tanto en el plano material como en el
espiritual, porque a través de él nos podemos acercar a nuestro Padre en forma
real y efectiva porque "todas las cosas son sagradas para los que siguen la guía
del espíritu"
Jesús, con su
ejemplo nos dió una prueba fehaciente de ello, pues de los años de su vida
terrena, dedicó 30 de ellos a una vida como cualquier ser humano y siendo muy
joven comenzó a trabajar como obrero y era conocido como tal, tanto que cuando
empezó su vida pública, el pueblo no entendía como un carpintero de Nazaret
podía hablar de esa manera.
"Este
carpintero de Nazaret comprendía plenamente la obra que tenía por delante, pero
eligió vivir su vida humana de acuerdo con la corriente natural. Y en estos
asuntos es ciertamente un ejemplo para sus criaturas mortales, porque vivió su
vida mortal como todos los otros miembros de la familia humana pueden vivir la
suya.1407"
Por lo mismo,
ninguno de nosotros puede considerar que lo que hace por pequeño que esto sea,
no tiene importancia, porque es a través de ese trabajo sencillo como podemos
alacanzar la inmortalidad, si aprendemos a darle a nuestros trabajos el valor
agregado de la conciencia de lo que hacemos y sabemos entregárselo a Dios como
tributo de nuestro amor y del deseo de hacer su voluntad, donde quiera que sea y
sin importar lo que estemos haciendo.
Jesús nos
exhorta "Dedicad vuestra vida a la elevación de la tarea diaria y común. Mostrad
a todos los hombres en la tierra y a los ángeles del cielo, cómo alegre y
valientemente el hombre mortal puede, después de haber sido llamado para
trabajar por una temporada en el servicio especial de Dios, volver a las labores
de los tiempos anteriores. Para vosotros, que habéis trabajado conmigo, todas
las cosas se han vuelto sagradas, toda labor terrenal es aun un servicio a Dios
el Padre.1960"
Aprendamos a
valorizar y hacer con alegría lo que hacemos, considerémoslo como una de
nuestras mejores herramientas para evolucionar y encontrar a nuestro Padre en
nosotros y por nosotros mismos en medio de nuestra vida cotidiana, al igual que
Jesús lo hizo.
Hoy día 1 de
Mayo elevemos nuestras oraciones de una manera muy especial por los miles y
miles de desocupados que en este momento hay en todo el mundo, roguemos para que
la bendición de un trabajo seguro llegue a todos ellos.
yolanda silva
solano