En el estado mortal, nada puede ser probado en
forma absoluta, tanto la ciencia como la religión se basan en suposiciones.
Libro de Urantia. Pág.1139
El universo es diverso, la unidad
se fundamenta en la integración de la diferencia que permite la sincronización,
el movimiento y la evolución. En el
microcosmo de nuestro organismo humano ocurre algo similar, porque todo se mueve
bajo los mismos principios. La evolución de la mente se va ampliando hasta
adquirir conciencia y cuando lo logra, influye en el cosmos, y a su vez, éste
nos permite acercarnos a verdades no descubiertas, pues “en el estado mortal,
nada puede ser probado en forma absoluta, tanto la ciencia como la religión se
basan en suposiciones. Existe mucho más por descubrir, más allá de lo finito que
está sin comprobar.”1139 debemos tene en cuenta que “nada de lo que toca
la naturleza humana, puede ser considerado
infalible.”1768
Cuán reconfortantes son estas palabras, porque ellas no
ponen límite ni a nuestro conocimiento humano ni a nuestra fe. No todo está descubierto, nos queda mucho por
aprender y experienciar, pero sólo en la diversidad es posible la
complementación y el enriquecimiento con las experiencias de los otros. También se necesita una gran porción de
humildad para ser capaces de aceptar la verdad de los otros y a la vez
despojarnos del egoísmo para compartir las nuestras, porque “la lealtad es el
fruto de una apreciación inteligente de la hermandad universal, no se puede
recibir tanto y no dar nada”435
“La religión de
espíritu significa esfuerzo, lucha, conflicto, fe , determinación, amor ,
lealtad y progreso. La religión de la
mente, la teología de autoridad, requiere poco o nada de estos esfuerzos de sus
creyentes formales. La tradición es un refugio seguro y un camino fácil para
esas almas temerosas e indiferentes que instintivamente evitan las luchas
espirituales y las incertidumbres mentales, asociadas con esos viajes de osada
aventura de la fe, a los altos mares de la verdad no explorada, en búsqueda de
las orillas más lejanas de las realidades espirituales, como pueden ser
descubiertas por la progresiva mente humana y experimentadas por el alma en
evolución” 1729.
yolanda silva solano yosis282@gmail.com